Hush - Tu verdadero Destino

[tutucakiller]

Hola, tras haber leido todas las historias que se escribieron en el foro, me animo a postear la mía. Espero que les guste.

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Tu verdadero destino

Desde la elevada ciudad en la que nací, clavada en un risco y subida en una aún más elevada muralla podía ver todos los bosques y llanuras que rodeaban a la ciudad del fuego. Desde niña, todo mi contacto con el exterior era espiando desde las alturas. Pasaba días enteros allí, mientras nuestros guerreros atravezaban las puertas para salir de caza, recolectar alimentos o simplemente para entrenarse en lo que marcaba nuestro destino, el arte de la guerra. Siempre, al amanecer, me sentaba en medio del pueblo y veía como todos los guerreros se preparaban para salir. Algunos afilaban sus grandes espadas, otros se ajustaban sus garras al punto tal que manos y garras se transformaban en una sola cosa. Mientras ellos estaban allí preparandose se veía más atrás a los ancianos, echando conjuros que ayudarían a aquellos guerreros a pasar otro día entero fuera del reino.
Cuando los preparativos estaban culminando salía corriendo a trepar las murallas para ver como los guerreros se perdían en el horizonte.

Recuerdo que cuando no estaba en aquella muralla estaba en el centro de la ciudad con los otros niños reviviendo aquellas batallas que nuestros padres nos contaban noche a noche, batallas contra humanos y contra elfos. Todos teniamos grandes espadas y garras hechas de madera, pero que para nuestra temprana juventud eran armas majestuosas, hasta creiamos ver el filo las mismas y oir como el aire se cortaba cuando aquellas armas se movían rapidamente. En esas batallas imaginarias siempre los demás niños iban al frente, golpeando a imaginarios enemigos que los atacaban ferozmente, pero nosotros siempre estabamos detrás, porque nuestros cuerpos no eran tan musculosos como los de ellos, siempre eramos la segunda linea. Esto me hacía enfurecer, ¿por qué no podía ser yo uno de los que golpeaban a los invisibles enemigos?, ¿por qué no podías ser yo quien comandara aquel ejercito?

Una noche, mientras mi padre dormía tras todo un día fuera de la ciudad le conté a mi madre aquella frustración que tanto me amargaba en los juegos, pero ella, con una tierna sonrisa me dijo: “Hija, todos desde que nacemos tenemos marcado a fuego nuestro destino. Puede que tu destino no sea empuñar una espada o unas garras, eso no es lo único para lo que estamos hechos los orcos. Hija mía, ¿has visto alguna vez a los ancianos detrás de los guerreros? Si los observas bien verás que ellos no son tan corpulentos, pero una sola de sus palabras hace enardecer el coraje de todos ellos”. Yo la miraba atentamente y embelesada con todo lo que me decía. Era cierto, aquellos ancianos hacían que los orcos se vean más fuertes, más rápidos y con más coraje. Nunca me había detenido a pensar en ese detalle. Me prometí prestar más antención de ahora en más a aquellos ancianos. Y mientras pensaba en ellos y tras un largo día de juegos me quedé dormida en los brazos de mi madre.

Al día siguiente y apenas el sol se asomaba en el horizonte salté de mi cama y me fui directamente a la plaza. Aquel día, como todos los días, los guerreros preparaban sus espadas y sus garras, pero yo ya no los miraba con tanta atención, solo podía mirar hacia atrás y ver a los ancianos. Empecé a notar que cerraban sus ojos antes de cada oración, y que tras decirla una estela de fuego los rodeaba a ellos y a los guerreros. ¿Como pude no haber notado semejante detalle después de haber pasado tanto tiempo mirándolos? Todo era nuevo para mí ahora, el significado de aquellas reuniones había cambiado.
Tan atentamente seguia aquella ceremonia que ni siquiera noté que el más viejo de entre los viejos se había sentado a mi lado. “Ya era tiempo de que lo notaras Hush, la mayoría ni llega a ver el fuego que los envuelve tras cada conjuro. Pero el místico que hay dentro tuyo empieza a desperar, y sin darte cuenta cuando repetías nuestros conjuros, el fuego te envolvía también. Mañana por la mañana quiero que estés a mi lado al momento de ayudar a los guerreros. Mañana comenzarás a conocer tu verdadero destino.”
Sin mediar más palabras se levantó, y volvío junto a los otros ancianos.

[Raziel_LP]

me gusto mucho, sobre todo la redaccion. esta bien enfocado en explicar lo deseado sin que los detalles distraigan al lector, a pesar de que estan ahi para hacer la historia mas completa

espero la segunda parte, tengo ansias de ver que le sucede a la orca =)

PD: te leiste todas las historias del foro? =O (que te parecieron?)

[tutucakiller]

Seguramente exageré un poco cuando puse TODAS, pero si es cierto que he leido unas cuantas !!!
En general me gustaron todas, más allá de la redacción o lo atrapante de las mismas, lo meritorio es que todas las historias son únicas y llenas de cosas particulares que dejan ver un poco de quienes las escriben.

Si hoy tengo un rato a la tarde (en el trabajo) veo si escribo un poco más de Hush y sus comienzos.

Byesss....

[tutucakiller]

Capítulo 2

Los guerreros salieron esa mañana como todas las mañanas, pero esta vez no celebré su partida. Todos mis amigos tomaron sus improvisadas armas pero yo no participé en el juego esta vez. Mi cuerpo se encontraba en la ciudad, pero mi mente se había alejado de mí hasta alcanzar distancias inimaginables, buscando respuestas a las preguntas que se me habían presentado esa mañana. El anciano diciéndome que ya era tiempo de que lo notara... ¿qué notara que?, éramos muchos niños reunidos en esa plaza, pero el anciano se sentó a mi lado y solo a mi se dirigió. ¿Por qué no noté antes como el fuego envolvía a ancianos y guerreros cuando se lanzaban los conjuros y ahora era para mi tan claro? Muchas preguntas daban vueltas en mi cabeza, pero no podía encontrar ninguna respuesta.
Tan ensimismada me encontraba en mis pensamientos que ni siquiera me di cuenta de que mi madre se acercaba.
“Hush, – me dijo – ya es hora de que vuelvas a la casa. El sol está cayendo y pronto regresará tu padre. Por favor ayúdame a preparar la cena”
“Si madre, no había notado que empezaba a anochecer” – contesté.
Caminamos de la mano hasta nuestra casa y juntas preparamos la cena. Mi padre llegó pocos minutos después, como siempre de excelente humor. Besó a mi madre y alzándome en sus brazos como cada noche me preguntó:
“¿Que ha hecho mi pequeña durante todo el día?, ¿Venciste nuevamente a feroces enemigos?
Cuando estaba en sus brazos me sentía única e inmortal, y disfrutaba cada segundo de su compañía. El que me alzara en sus brazos ya se había vuelto un ritual diario y no imaginaba un día sin eso. Entre juegos y caricias le dije:
“¿Notaste esta mañana que el mayor de los ancianos se acercó a mi? Me dijo que mañana por la mañana quiere que esté a su lado al momento de lanzar los conjuros. Me dijo también que al igual que ellos, mientras repetía sus conjuros una llama aparecía a mi alrededor y rodeándolos a todos. ¿Lo has notado padre?”
“Hija mía, he visto al anciano a tu lado. He sentido el fuego rodeándome tras sus conjuros, pero jamás lo he visto. Solo aquellos que nacen para ser shamanes pueden conjurar y ver los efectos de cada aura. Nosotros, aquellos que nacimos para el enfrentamiento cuerpo a cuerpo necesitamos de los místicos para que nos protejan y nos ayuden, como los místicos necesitan de nosotros para no tener que llegar a la lucha cuerpo a cuerpo, pero nunca veremos ni podremos conjurar”
Mientras me decía todo esto, mi madre, alejada de nosotros lo miraba con aprobación.
“Hush – dijo ella – a partir de este día todo cambiará para ti. El anciano te eligió entre todos los niños para comenzar con tu entrenamiento. Sabíamos desde que naciste que este día llegaría, pero no imaginamos jamás que sería tan pronto. Desde que naciste notamos que no eras tan fuerte como los otros niños, pero vimos en tus ojos un brillo que solo proviene de aquellos que fueron elegidos para la magia. El anciano te ha elegido como su discípula, así que mañana tendrás un día muy agotador. Cenemos ahora y vayamos a dormir”
La cena fue poco común. Si bien es cierto que todos estábamos alegres porque había sido un buen día de caza para mi padre, algo extraño flotaba en el ambiente. Ocasionalmente veía que mi madre me miraba con cariño, pero era una mirada diferente, una mirada de despedida. Mi padre, por su parte nos relataba con todos los detalles todo lo que había sucedido en los bosques, pero su voz tampoco era la misma de siempre.
Una vez acostada mi madre se acercó a mí y, como todas las noches, me contó historias de cómo era todo antes de que comenzara la ira de los dioses. Me contaba que se podía caminar por los bosques e ir a los lagos, que no había peligros y que todos vivian en perfecta armonía.
Y así, imaginandome corriendo por los bosques me fui quedando dormida.

[n3k_lp]

muy MUY bueno. Me gusto =D

[PanZer_AG]

3º capitulo!!.. esta muy biueno!! dale, inspirate!! :D

saludos

[tutucakiller]

Capítulo 3

Cuando mi madre llegó a despertarme ya me encontraba cambiada y lista, ansiosa por comenzar con mi entrenamiento junto al anciano. Me levanté para desayunar justo en el momento en que mi padre iba a reunirse con los demás guerreros, así que me dispuse comer rapidamente, pero mi madre me dijo:
“Se que estás ansiosa, pero hoy es un día muy importante y vas a tener que estar atenta y fuerte para entrenarte, así que tómate dos minutos más y come otro poco”
“Pero madre – le dije – ya van a empezar con los conjuros y necesito estar allí, el anciano me lo pidió”
“si, ya lo se, pero el anciano sabe como pienso y te esperará antes de comenzar, te lo aseguro. Come un poco más, lo necesitarás”
Disconforme con ese retraso, pero haciendo caso a mi madre me senté nuevamente a la mesa y comí algo más.
“Ahora si, me voy con los demás”.
“Espera – me dijo – ven un momento”
Mi ansiedad por salir corriendo de la casa hacía que me molestase cada retraso ocasionado por mi madre, pero respetuosa de sus órdenes me acerque a ella, que suavemente me encerró entre sus brazos y me besó calidamente.
“Ten esto hija mía, es un collar que fue pasando de madre a hija durante muchas generaciones de la familia. Cada una de las mujeres que lo tuvo traslado parte de su energía a la piedra que está engarzada en ese collar, por lo que el mismo posee una carga mágica inmensa. Si alguna vez realmente necesitas una fuerza que no poseas, este medallón te la dará. Ahora si puedes irte, buena suerte hija”
Salí corriendo de la casa mientras me ponía el collar, y al darme vuelta para cerrar la puerta vi a mi madre sentada, con la cabeza entre las manos. No había ni tristeza ni dolor en su expresión, más bien era algo así como resignación a lo que ya sabía que sucedería tarde o temprano.
Mientras me acercaba al lugar en que todos estaban reunidos iba buscando la figura de mi padre, a quien vi un poco más adelante. Corrí hacia el y abrazándolo fuertemente por la espalda le desee un excelente día de caza. El me miro y me dijo:
“Veo que tu madre ya te ha dado el medallón de la familia. Esa joya, que para muchos no es más que una piedra colgando de un hilo, posee el conocimiento y la fuerza de muchas generaciones de magos. Nunca estarás sola mientras lo lleves. Ahora, ve con el anciano, que te está esperando”
Corrí nuevamente como loca, esquivando a los guerreros y sus armas, prestando especial atención a estas ya que un golpe contra cualquiera de ellas podría hacerme mucho daño. Una vez evitados todos los obstáculos pude llegar junto al anciano, que me dirigió una mirada de reproche.
“Era de esperarse que llegaras más tarde que siempre. Tu madre... bueno, ya habrá tiempo de hablar de eso, ahora comenzaremos con los conjuros. Es importante que, más allá de conocer las palabras para conjurar puedas empezar a manejar la fuerza interior que posees. Esa fuerza, esa energía es tan poderosa que usada a la ligera y sin pensar puede ser muy peligrosa, no solo para ti, sino para todos los que te rodeen. Cuando conjures piensa que los guerreros necesitan de ti, de tu magia para pasar un largo día afuera de la ciudad.
Aprenderás que nosotros manejamos dos tipos de magias: las de soporte, que son las que cada mañana damos a los guerreros, y las de control o ataque, que ya utilizaremos cuando empecemos a recorrer los bosques.
Presta atención a las palabras que utilizamos y sobre todo a los guerreros. Siempre ten en cuenta que si uno de ellos se aleja, tu conjuro no llegará a alcanzarlo y estará desprotegido. Es hora de comenzar”
Dicho todo esto llamó a los demás ancianos, quienes se acercaron rapidamente al centro de la ciudad. Todo estaba preparado, los conjuros comenzaban.
Estudie cada palabra que decían y cada movimiento que hacían. En sus ojos se veían unos destellos brillantes tras cada palabra y unas llamas rodeaban tanto a los ancianos como a los guerreros. Traté de imitarlos, pero en los primeros intentos no sentía que estuviese ayudando. Sentía que el poder empezaba a fluir, pero cuando tenía que dejarlo salir algo pasaba. Seguramente eran los nervios, pero pasaba el tiempo y no sentía que estuviese aportando nada. Poco a poco iba montando en cólera por no saber que era lo que estaba haciendo mal, que era lo que me limitaba. ¿Sería que el anciano se había equivocado? ¿Sería tal vez otro de los niños quien debiese ocupar este lugar? Mientras pensaba en todo esto, el anciano se acercó a mí y me dijo:
“Ay pequeña, eres igual de exigente de lo que fue tu madre en su primer día conmigo, queriendo que todo suceda ya. No te impacientes, date tiempo, ya podrás manejar la magia que hay en ti”
“Anciano, ¿dijiste mi madre? ¿Qué tiene que ver mi madre con esto? ¿De que primer día me hablas?” le dije
“Claro, desde tu nacimiento tu madre siempre ha estado a tu lado, cuidándote y viendo que todo sea lo mejor para ti, pero Hush, tu madre también fue mi discípula hace muchos años, y para ser franco, fue la mejor alumna que cualquier maestro haya tenido. El poder que posee, su conocimiento de la magia es inmenso e innato. En su primer día se sentía igual a ti, insegura y temerosa, pero poco a poco fue ganando confianza y conjurando”
“Pero anciano, debes estar equivocado. Jamás he visto a mi madre utilizando la magia, ni siquiera para ayudarlo a mi padre”
“Muchas cosas sucedieron para que tu madre se aleje de la mística, pero ese es un tema que hablaremos en otra ocasión” – Su respuesta fue tajante y entendí que ya no tendría más respuestas por hoy – “Ahora voy a decirte un pequeño secreto para que puedas ayudarme. Hasta ahora has tratado de conjurar pensando en si podías o no hacerlo, pensando si eres apta para hacerlo o no. Y estás equivocada en la forma en que planteas el problema, hazlo de esta forma, mira a tu padre y piensa que el, al igual que todos los demás, necesita de tu ayuda. Piensa que sin tus conjuros tu padre estará desprotegido. Puedes hacerlo, solo tienes que QUERER hacerlo”
Tras estas palabras el anciano se alejó unos pasos y se quedó mirándome. “Puedo hacerlo” pensé, y busque a mi padre entre todos los guerreros. Cuando di con el observé que me miraba a los ojos y me sonreía, con la misma sonrisa que cada noche me regalaba cuando me alzaba en sus brazos. Que hermosos momentos habíamos tenido siempre, cuantos juegos y cuantas historias habíamos compartido.
Otra vez la mano del anciano en mi hombro. “puedes verlo Hush, la magia ya está emanando”. Miré a mi alrededor y los ancianos habían callado, nadie estaba conjurando, pero vi que el fuego me envolvía, y que envolvía también a mi padre, y a quien estaba a su lado, y al otro, y al que se encontraba a su derecha y.... todos estaban envueltos en los anillos que generaban las magias. Por fin sentía que estaba ayudando.

[kewa]

Muy buena historia, con leer lo que escribiste me doy cuenta que sos de las personas que realmente "juegan" en el server (seguro entendés a qué me refiero)

Me encantaría salir juntos de cacería así puedo ver todo lo que has aprendido de aquel anciano y yo puedo mostrarte lo que me han enseñado a mí los sacerdotes de paagrio...

un abrazo,
kewa

[KKCK]

lo lei todo IM- PRE- SIO--NAN- TE


Me encanto.....


By OneShoT

[spectre]

CUANTO COBRAS LOS DERECHOS PARA UNA PELI ?

JAJAJA MUY BUENO

[PanZer_AG]

4º capitulo!!! ahhh!!!! -.- lo estas haciendo con suspenso!!... cuando te vea ingame te pkeo!!!!

na mentira.. muy buienop hasta ahora.. a ver como sigue?? XD

[tutucakiller]

Podré vender los derechos por Adena???? Porque Taurin me está apretando por unas deudas de juego que tengo !!!! Jejejejeeeee

Esta semana estoy de viaje, si puedo la semana que viene continuo con la historia.

Byessss..

PD: Nada de andar pekeando a Hush Por ahi ehhhh !!!!!!

Byes !!

[shagrath666]

hola perdon que desvirtue pero q es esto :S
alguien si me esplica asi participo :D

[PanZer_AG]

nada.. es la parte de rol!!, los q tienen inspiracion , inventan una historia sobre su personaje ingame.. y nada.. los demas los critican para bien o para mal!.....

espero q hayas entendido!...
y a ver cuando hush se inspira y nos sigue contandoooooooooo!!!!!!!!!!!!!!

[demon_cry]

***! kiero saber como termina : (

edit: de todas las historias de rol q lei, esta es la mejor (hablando del l2)

[Muscleman]

:') mierda.... porque se mojan mis ojos .... -.- la verdad que es imprecionante como te vas imaginando todo lo que te dice... lograr eso en el lector no es nada facil, Hush te felicito, como los demas, espero el 4to capitulo.... quiero saber el porque de la mama de hush se separo de la magia, que habra pasado... hush se convertira en una verdadera shaman? el anciano va a morir? kierooo mass porfis! Yo soy de esos que se calzaban las garras tal asi.. que parecen mis manos.. ^^

[tutucakiller]

Capítulo 4

El sol seguía asomándose tímidamente sobre las murallas de la ciudad que minutos antes estaban inundadas de euforia y de poder. A lo lejos se veía a los guerreros perdiéndose en el horizonte, confundiéndose con el paisaje. Una suave brisa se permitía ahora corretear por la abandonada plaza céntrica y mover levemente los carteles que indicaban cada tienda.
Yo, miraba el horizonte imaginando a mi padre con su gran espada al hombro, riendo con sus amigos sin perder la atención en el entorno. El sabía bien que un descuido cuando se internaban en los bosques podría significar la muerte para el y para quienes le acompañaban.
Un murmullo distrajo mi concentración, al darme vuelta vi que los ancianos hablaban con mi mentor y se veía en sus rostros un dejo de preocupación. Fue poco lo que llegue a oír de aquella conversación, solo palabras sueltas o frases que el viento no dejaba que terminen de llegar a mis oídos. “Pocos han podido manejar las magias en su primer día de entrenamiento”, “Ese poder no puede salirse de control, sabes que la última vez que ello sucedió... “, “Espero que puedas manejar esta situación, no podemos permitirnos que nuevamente... “.
Las frases se perdían, pero veía que los ancianos cada tanto me dirigían una mirada y nuevamente hablaban con mi maestro. “Hemos dicho”, eso fue lo último que dijeron antes de marcharse. Vielle, mi anciano maestro medito unos momentos antes de acercarse a mi, con un andar sigiloso. Por un momento hasta me pareció ver en su rostro una pequeña sonrisa que desapareció al instante, volviendo su semblante a la forma habitual.
“Bueno pequeña, esta mañana has opacado a muchos alumnos que ya hace tiempo que están aprendiendo junto a los demás maestros. Eso los ha preocupado un poco y se encuentran sorprendidos. Pocas veces se ha visto a alguien en su primer día de entrenamiento poder conjurar a todos los guerreros al mismo tiempo, para ser exactos, contigo este es el tercer caso que se ve. Hush, tienes mucho potencial, serás una gran Shaman en poco tiempo y luego decidirás cual es el camino a seguir. Ahora, caminemos un poco”.
Obedeciendo sus palabras caminé a su lado, en silencio mientras nos alejábamos poco a poco del centro de la ciudad, acercándonos cada vez más hasta la inmensa puerta que nunca había cruzado, la puerta que dividía la tranquilidad de la ciudad con aquella peligrosa naturaleza por mi desconocida. A medida que nos acercábamos al límite mi paso se hacía más lento, como si estuviese tratando de nunca llegar allí. Mi maestro, atento en todo momento notó mi inseguridad y sonrió, al mismo tiempo también alentó su paso, como para brindarme tranquilidad.
“No temas Hush, apenas nos asomaremos fuera de la ciudad, no correremos ningún peligro. Los animales que rodean nuestra ciudad no son rivales para mi, pero así y todo, no suelen atacar tan cerca. Además, yo estoy para protegerte ante cualquier problema”.
Un poco más segura con sus palabras gané confianza y seguí su camino, perdiendo un poco el miedo. Nunca había estado tan cerca de la puerta, los árboles se veían muy distintos ahora que los veía desde abajo, los troncos, los hongos que crecían en ellos, algunas aves, todo eso estuvo siempre oculto a mi mirada, ya que siempre veía esos mismos árboles desde arriba, trepada a la muralla. Apenas atravesamos el portal empecé a ver algunos animales pequeños, que andaban en cuatro patas. Seguramente eran los lobos de los que mi madre tantas veces me había hablado y a los que mi padre mataba orgulloso con un solo golpe de su espada. Es más, solía decir que ni siquiera hacía falta que los golpee, con solo dejar caer libremente su espada sobre ellos alcanzaba.
Desde lejos los lobos nos miraban con cierto recelo, pero se alejaban de nuestro camino a medida que nos acercábamos.
“Hush, estos serán los primeros animales que aprenderás a dominar. No temas su ataque, ellos tendrán más miedo que tú, pero su condición de animales los hará atacar aun sabiendo que van a morir. Yo estaré aquí, a tu lado en caso de que algo salga mal, pero pelea con todas tus fuerzas, como si tu vida dependiese de eso ya que yo no estaré siempre para protegerte. Toma, ponte esta armadura de entrenamiento. No es como las que llevan los guerreros pero es mucho más efectiva que la ropa que traes puesta. Ten este báculo, con el podrás canalizar más rápidamente la energía y dirigirla a tus enemigos”.
Tras apoyar mi nueva arma, un arma de verdad en el piso me coloqué la armadura. Esta era mucho más resistente que mi ropa y parecía mucho más pesada cuando la tenía en las manos, pero ahora que me la había puesto la misma se había vuelto liviana, muy liviana, tan liviana que apenas notaba que la llevaba puesta. Recogí mi arma del piso y miré a mi maestro. “Ya estoy preparada. ¿Qué es lo que debo hacer ahora?” le pregunté. El me contestó “Para empezar, deja fluir la energía, a diferencia de los guerreros, que necesitan de los místicos para lanzar los conjuros, tu puedes echártelos a ti misma. Así que solo has eso, piensa en que debes protegerte”
Cuando me disponía a empezar a pensar en ello, simplemente la energía fluyo desde el interior, como si ella misma supiese que debía lanzarse. Esto sorprendió un poco al anciano, ya que me dirigió una mirada rápida al notarlo, tras la cual una expresión en su cara me hizo suponer que ya lo sabía. No se si era por la armadura o por mi báculo, pero la magia fluía sin necesidad de hacer ningún esfuerzo, todo era natural. Tanto disfrutaba aquel momento que no llegue a notar la expresión de temor que tenía mi maestro mientras miraba algo que parecía estar detrás de mí. Gire rápidamente sobre mis talones y repentinamente vi a uno de aquellos lobos volando directamente hacia mi. Mi primer encuentro con la muerte fue terrorífico, cerré los ojos con fuerza y traté de correrme, pero ya era tarde, sentí sin ver que aquel animal pasaba como en llamas a mi lado, clavándome sus dientes en el hombro. De milagro aquél leve movimiento que realicé hizo que la bestia no mordiera mi cuello. El dolor en mi hombro era insoportable. ¿Por que el anciano no había reaccionado ante aquel ataque?, ¿No se suponía que iba a protegerme? El lobo estaba en llamas, a unos metros de mi, y disponiéndose a atacarme nuevamente. ¿Por qué aquella bestia ardía en el suelo?
Un grito de mi maestro, un “NO” quebró el silencio que reinaba en el bosque. “No lo hagas, ya conoces la maldición. Que ganes esta batalla no tendrá ningún sentido”. El anciano miraba sobre mi hombro cuando decía estas palabras. Detrás de mí, vi una figura que brillaba, envuelta en fuego, un fuego como el de los conjuros pero mucho más poderoso. Me sentí cegada por aquella luz, pero así y todo mantuve la vista y ahí descubrí que quien brillaba de esa forma no era otra que mi madre. Mi madre estaba envuelta en magia, lista para atacar, pero ¿por qué el anciano la detenía? El lobo, dejé de mirar al lobo que estaba a punto de atacarme. El tiempo se detuvo, quise darme vuelta pero aquel movimiento pareció demorar siglos. El lobo estaba a centímetros de mi rostro...
Algo cortó el viento. Un destello brilló en el aire.
La espada de mi padre cortó al medio a aquella bestia. No me dijo nada. Mi madre ya no brillaba tanto, pero se acercó a nosotros. Me alzó en sus brazos, miró a mi maestro y dijo: “Sabes que no puedo hacerlo, pero espero que tu lo hagas. Todo terminó por hoy. No hay más que hablar”. Lentamente se dirigió nuevamente a la ciudad. Lo último que llegué a ver antes de desmayarme fue a mi padre, clavando su espada a milímetros de los pies del anciano. “No hagas que muera tratando de matarte, eres más hábil que yo, pero sacaré fuerzas de todos mis ancestros en caso de que mi hija vuelva a pasar por este peligro mientras tu simplemente observas. No me pongas a prueba”. Arrancó la espada que estaba clavada en el piso y se dirigió a nosotros. Mi maestro sonrió.

[tutucakiller]

Up Up Up !!!!!

[PanZer_AG]

jojojojoojjoo"!!!1 muy buenoooo!! como los demas capitulos.. pero con mas suspenso.. dale pibe!!! inspirate mas rapido!!!!!!!! 5ºcapitulo, compro los derechos de autor y me lleno de guitaaaa!!!!=P

[tutucakiller]

Up Up Up Up Up Up Up !!!!!!!!!!!!!!!!!!

[tutucakiller]

Ultimo UP UP UP antes del cap. 5 !!!

[demon_cry]

T_T me voy de vacaciones ahora... cuando vuelva plis tenete el capitulo 5 :P

yo lo voy a leer! tenes un lector asegurado

[ferfa]

...

PD: no tengo palabras... realmente... QUE BUENA HISTORIAAAAA!!!!!!!!!!!!!!!!!
mete el 5º porfaaaa... rapiiiidooo.....

[LaLaSkVio]

Capitulo 5 YAAAAAAAAAAA !!!!!!!!!!!!!!!!!!

[tutucakiller]

Capítulo 5

Cuando recobré el sentido me encontraba tendida en mi cama, con la habitación completamente a oscuras, solo un poco de la claridad de la luna lograba filtrarse sobre las pesadas cortinas que ocultaban la ventana. Poco a poco empecé a recordar lo sucedido ese día y tocándome el hombro pude comprobar que no había sido un sueño. La herida ocasionada por aquel animal no era profunda, pero si lo suficientemente dolorosa como para no olvidar nunca aquel día. Un murmullo cortaba el silencio que envolvía aquella habitación, las voces de mi madre y mi padre se escuchaban aunque seguramente ellos trataban de hablar en voz baja para no despertarme. “Pero ella podría haber muerto – decía mi madre – y el estaba allí, sin hacer nada, solo observando”. “El no hizo nada, pero ella podría haber muerto igualmente si tu atacabas a aquella bestia, conoces la maldición que recae sobre ti. Espero que domines tu ira. Nuestra hija es lo suficientemente fuerte como para matar a ese lobo sin ayuda, pero todavía no sabe como hacerlo. Inconcientemente y sin notarlo ella misma lo atacó y hizo que el mismo se queme en vida, mi espada solo terminó el trabajo”.
No era la primera vez que escuchaba hablar de aquella maldición ese día, pero, ¿de qué maldición hablando todos? ¿Por qué mi madre estaba alejada de la magia y por que el anciano le prohibió defenderme?
Las imágenes del día venían a mi mente unas tras otras. La sonrisa del anciano tras los reclamos de los demás maestros, el paso lento al llegar a la entrada al bosque, mi nueva armadura y arma tiradas en el piso, los lobos que se alejaban mirándonos con recelo, la expresión de temor de mi maestro segundos antes de la embestida de la bestia, mi madre brillando con una luz que jamás había imaginado, el cuerpo del lobo en llamas dividiéndose en dos por la espada de mi padre, mi madre alejándose conmigo en brazos, y como última imagen, la espada de mi padre clavada a milímetros de los pies de maestro. Las imágenes se repetían una tras otra y nunca dejaban de sucederse. Todo había pasado demasiado rápido.
Oí un golpe seco a lo lejos, seguramente alguien golpeaba la puerta. Sentí que la misma se abría y la voz de mi madre saludaba.
“Sean bienvenidos. Perdonen nuestra sorpresa pero es extraño recibirlos a todos a tan altas horas de la noche en nuestra morada” – era mi padre quien hablaba ahora – “¿Tienen algo que decir sobre lo sucedido hoy con nuestra hija?”.
Se hizo un silencio sepulcral, tras el cual escuché la voz de uno de los ancianos que decía:
“Nos enteramos de lo sucedido y estamos muy preocupados al respecto. Sabemos que su hija salio herida de la contienda, pero tenemos entendido que no ha sido nada de gravedad y esperamos que la niña se recupere pronto”
“Si no hubiese sido por mi... “– uno de los ancianos interrumpió a mi padre, haciéndolo callar –
“Si tu no hubieses estado nada habría cambiado, la niña tendría alguna otra herida leve, pero habría terminado con la fiera sin mayores problemas. También sabemos que Vielle se quedó allí, solo observando, pero aunque no estemos de acuerdo muchas veces en su modo entrenar a sus alumnos, no podemos negar que es un gran maestro. Casi todos quienes han aprendido con el han llegado a ser los mejores magos del reino y son quienes hoy pueden adentrarse en los bosques sin correr ningún peligro y acompañar a cualquier guerrero en una batalla. Son temidos por los humanos, los elfos de la luz y los de la oscuridad. En cada batalla que participan dejan sus marcas a los enemigos y siempre dejan alguno con vida para que corran la voz de su poder”
“Si, ya todos conocemos esas historias – dijo mi madre - , ¿pero amerita eso la visita de casi todo el concejo de ancianos a estas horas?
Otro de los ancianos tomó ahora la rienda de la conversación, diciendo:
“También oímos de tu participación, aunque inconclusa en el problema de esta mañana y es eso lo que nos trae aquí. Esta mañana todo podría haber cambiado para nuestra ciudad si hubieses lanzado algún conjuro, y lo sabes. Fue imprudente de tu parte haber reaccionado como lo hiciste, una catástrofe podría haber sucedido. ¿O no recuerdas lo que pasó aquel día en los bosques? ¿Has olvidado ya la maldición?“
Ya no soporté seguir escuchando a escondidas y salí de mi habitación. Allí estaban mis padres y todos los ancianos excepto Vielle. Al verme, mi madre comenzó a indicarme que volviese a la cama, pero uno de los ancianos la detuvo y le dijo: “ya es hora de que lo sepa. Hush, voy a contarte la historia de un niño y una niña que al igual que tu sorprendieron a todos los ancianos en su primer día de entrenamiento. El se llamaba Balanth y ella, bueno, pues ella es tu madre. Ambos fueron los mejores alumnos de Vielle, aprendían tan rápidamente que pronto supimos que nadie iba a opacar jamás su poder, esto nos llenaba de orgullo, ya que iban a encabezar muchas batallas en el fututo. Balanth tomo el camino de los Overlord y pronto todos confundían su nombre con la profesión. Los niños querían ser tan poderosos como el y día a día peleaban para ver quien usaba su nombre. Ella en cambio, Eligio la senda de los Warcryer. Pocas fueron las batallas en las que participaron, pero sus nombres se transformaron en sinónimo de Invencible para sus enemigos. Ambos iban al frente de cada ejercito y con solo verlos muchos de sus enemigos ya corrían o simplemente se desplomaban pidiendo piedad, piedad que tu madre generalmente tenía, pero Balanth, en cambio se volvía poco a poco más sanguinario. Tu madre, aunque se encontraba en desacuerdo con muchas de sus acciones seguía a su lado pues tenía la esperanza de hacerlo ver el bien. Cuando no estaban en una batalla se perdían en los bosques y se perfeccionaban aún más en sus poderes. Pero una tarde, mientras ambos se encontraban en los bosques una figura apenas visible apareció a su lado. Dejándolos a ambos petrificados les ofreció un trato. Les ofreció un poder incalculable y el dominio de todas los reinos, a cambio de que sean sus generales en cuanta matanza quisiera. Tu madre, ofendida por la propuesta se puso furiosa y trató de atacarlo, pero Balanth, había elegido mal, Eligio la propuesta de aquella figura y congelo a tu madre, dejandola atada al piso. “Balanth, esta es tu primer misión, cumplela y todo lo que te prometí será tuyo. Es muy simple, solo tienes que volver a la ciudad y destruirla por completo, no debe quedar una sola persona con vida. Si aceptas serás odiado por todos los orcos que hoy no estén en la ciudad, y seguramente buscaran tu cabeza el resto de sus días, pero desde ese momento serás temido por todos los reinos y podrás hacer con ellos lo que te plazca, ya que nadie se enfrentaria a alguien que ni siquiera tuvo compasión por los suyos”. Balanth lo pensó unos segundos y tras sonreir miró a tu madre y le dijo: “Este no es tu momento, nos volveremos a encontrar en alguna batalla, pero desgraciadamente ya no seremos del mismo bando. Adios”.

[demon_cry]

:O

q grozo

edit: caritas feas salen solas -.-

[tutucakiller]

Un UP !!!!!

Se viene el próximo capítulo !!!!!!


byessss...

[tutucakiller]

Capítulo 6

“Si me lo permite, desearía continuar yo con el relato – dijo mi madre al anciano que hasta ahora había mantenido el monólogo – ya que me interesa que mi hija, conozca no solo los hechos, sino también todo lo que sentí. Hija mía, esta es la historia... “
Mi madre hizo silencio un minuto mientras trataba de acomodar los recuerdos en su cabeza. Mi padre, al igual que los ancianos, aguardo el relato de mi madre mientras me alzaba en sus brazos.
“Balanth y yo teníamos la misma edad cuando comenzamos con nuestro entrenamiento, – mi madre comenzó con el relato – ambos éramos unos niños y al igual que tu pasábamos nuestros días jugando y fantaseando con batallas y guerras. Desde pequeño había algo en el que llamaba mi atención. Siempre encontraba la forma de convencer a los demás niños de que sería mejor para ellos ser guerreros, pero que debían ir detrás suyo a cada batalla, y ellos, sin quererlo ya le daban el poder de mando de cada juego. Yo era muy pequeña aún y no consideraba importante ir al frente o a la retaguardia, después de todo, todo lo que quería era jugar con mis amigos. Una mañana, sumamente calurosa, recuerdo que al llegar al centro de la ciudad vi a Balanth caminando junto a Vielle, y supe inmediatamente que lo había elegido como su alumno, esto no me llamó la atención inmediatamente, ya que aunque todos los maestros siempre comenzaban a reclutar muchos niños a la vez, Vielle siempre elegía unos pocos a quienes enseñar. Los vi caminar juntos un rato y luego separarse, saludándose hasta el día siguiente. Pocos minutos pasaron hasta que el anciano se acercó a mi y me dijo: “Note que me observabas mientras caminaba con tu amigo pero no ví en tu mirada ni un dejo de envidia, al contrario, parecías feliz de vernos”. Balanth era un amigo para mi, por lo tanto cualquier cosa buena que le sucediera era para mi motivo de satisfacción. “Pequeña, me gustaría que tu también estuvieses conmigo mañana al amanecer. Se que ustedes son muy amigos y me gustaría que se ayudasen el uno al otro con los entrenamientos”. Acepté más que contenta y al contarles a mis padres ellos también se alegraron. Al día siguiente comenzamos con nuestras clases y poco a poco, y con el correr de los días ganamos confianza y fuimos aprendiendo juntos. El entrenamiento era muy duro, pero estando acompañados se nos hacía más divertido. Veíamos a los niños que estaban con otros maestros, pero ellos parecían avanzar más lentamente que nosotros. Mientras nosotros pasábamos días y días solamente con entrenamiento de batalla, los otros niños pasaban tardes sentados junto a sus maestros en los bosques, forjando el carácter además de la fuerza. No comprendí hasta demasiado tarde la importancia de esas horas en las que solo meditaban y se volvían más profesionales. Vielle se esforzaba en lograr que seamos prácticamente invencibles estando solos, mientras que los demás enseñaban a los niños a trabajar como equipo. Cuando estuvimos preparados para elegir nuestro camino los alumnos de los demás ancianos estaban muy retrasados, pero mentalmente mucho mas fuertes y con un gran sentido de compañerismo. Llegó el día tan esperado, el día en que dejamos de ser Shamanes y el día en que debíamos elegir nuestro destino. “Overlord – gritó Balanth en el Templo de Paagrio – mi destino es ser Overlord, echaré maldiciones sobre todos mis enemigos y así conseguiré derrotarlos”. Vielle sonrió ante tal elección y con una mirada de aprobación lo felicito. Yo en cambio, elegí marchar junto a los demás guerreros para poder bendecirlos en cada una de esas batallas. Warcryer, esa fue mi elección, Warcryer”.
En este punto del relato hizo un silencio, como rememorando aquellos días. Yo mientras tanto trataba de imaginar a mi madre como una gran Warcryer, ayudando a quienes lo necesitaran. Pero seguía sin comprender el por que nunca la había visto ayudar a mi padre todas las mañanas. Noté que mi madre se disponía a continuar con su relato, así que dedique toda mi atención a ese momento.
“Desde aquel día noté que algo cambiaba en mi amigo. Balanth poco a poco dejó de ser aquel niño con ansias de aprender, y yo, al notarlo, me mantuve a su lado tratando de hacer que vea que el se estaba equivocando, que se estaba torciendo. El se ofrecía para ir a cada batalla, y para no abandonarlo yo también. Siempre traté de llevarlo por la senda de la razón, pero el ya había cambiado. En cada enfrentamiento que había con los enemigos el se volvía más y más sanguinario, aniquilando a ejércitos completos solo por el placer de hacerlo. Comenzó a dar instrucciones a los demás guerreros, que ya no veían con agrado su liderazgo. “Balanth El Ejecutor” le llamaban, pero algunos pocos lo llamaban “Balanth El Traidor”. Su nombre recorrió todos los reinos sembrando el terror de su ataque a cada ciudad. Batalla en la que participaba era una batalla ganada, era invencible, pero el ejército ya no lo respetaba tanto. Otros Overlords más viejos trataban de aconsejarlo, pero el no parecía escucharlos y hasta se burlaba de ellos invitándolos a pelear con el. Esta conducta llegó a los oídos de los demás ancianos, y a través de ellos hasta Vielle, que preocupado me llamó una tarde. “Solo a ti te escucha, siempre fuiste su compañera y te respeta. Trata de hablar con el, trata de que entienda que todo ese poder no puede ser controlado con ira”. Pero le respondí que ya lo había intentado muchas veces y que siempre había fracasado. El ya no me escuchaba aunque la mayor parte del tiempo estuviésemos juntos, en batallas o solo en los bosques entrenando. “Te elegí a ti como compañera Balanth porque eres la única de todos los que están entrenando que posee el mismo poder que el, eres la única que podría llegar a detenerlo en caso de que se vuelque hacia la senda del mal. Deposito toda mi confianza en ti, Igradin”.
“Esas palabras fueron una enorme carga para mi, ya que me sentía en la enorme responsabilidad de cuidar de un volcán a punto de entrar en ebullición. Seguí hablando con el y tratando de que entienda, pero era en vano. Y fue así que una tarde, mientras entrenábamos, apareció esa figura de la que habló el anciano aquí presente”.
Nuevamente el silencio de mi madre llenó la habitación. Respiró profundamente, como si el aire no le alcanzase para terminar la historia y continuó.
“De un momento a otro, ambos quedamos petrificados, sin siquiera poder darnos tiempo a defendernos. La voz que nos habló era gutural, opaca y retumbaba en cada piedra, en cada árbol de aquel bosque. Nos habló de lo poderosos que éramos con respecto a los demás y de lo poco que duraría cualquier ejercito que se enfrente a nosotros. También nos dijo que a su lado, todos los reinos caerían a nuestros pies y nos hizo una propuesta. Si aceptábamos estar a su lado nos daría lo que quisiésemos, poder, adenas, ejércitos de demonios a quienes comandar, en fin, nos ofreció todo lo que yo detestaba, pero con una sorpresa no tan grande vi como Balanth analizaba esa posibilidad. No demoró más de unos minutos en aceptar la propuesta de aquel extraño. Indignada le dije que el verdadero poder consistía en ayudar a los demás, no en asesinar a sangre fría, pero el no me escuchó. Simplemente me dijo “Esa es la diferencia entre nosotros Igradín. Siempre fuiste muy idealista, pero mi mirada ve más allá de la tuya. Un mundo nuevo nos espera, un mundo que ambos podríamos gobernar, pero se que mis palabras no hacen más que enfurecerte. Agradezco la compañía que me brindaste durante todo este tiempo, y por sobre todo agradezco tu amistad, pero ahora nuestros caminos se separan”. Nuevamente la voz de aquella figura inundó todo el bosque. “Balanth – le dijo – Si quieres todo lo que te propuse debes ganarte mi respeto, cumple esta misión y serás uno de mis generales. Vuelve a tu ciudad, a tu pueblo natal, y mata a cuanto ser humano se encuentre ahí. Así ganarás mi respeto”.
Fue en ese momento que el hechizo que me tenía atada al suelo desapareció. Rápidamente traté de atacar al extraño, pero Balanth me ató al piso con una de sus maldiciones. Le supliqué que no lo haga pero no pude convencerlo. “Este no es tu momento, nos volveremos a encontrar en alguna batalla, pero desgraciadamente ya no seremos del mismo bando. Adiós”. Y tras decir esto se alejó de mí con rumbo a la ciudad al tiempo que la figura desaparecía. Lo seguí con la mirada hasta que se perdió en el horizonte, pero seguía allí inmóvil sin poder acercarme. Pasó un largo rato hasta que el maleficio se deshizo y rápidamente me dirigí a la ciudad. Mientras me acercaba oía los lamentos ahogados de los niños y de todos cuantos habitaban la villa. Al llegar a la puerta pude ver lo que ya sabía iba a encontrar, mis amigos, mi familia, algunos ancianos, aquellos guerreros con los que tantas batallas ganamos, todos yacían en el piso, muertos o prácticamente muertos, y el, parado en medio de la ciudad seguía echando maldición tras maldición. Horrorizada y con los ojos llenos de lágrimas no pude hacer otra cosa que atacarlo. La batalla que mantuvimos duró mucho tiempo, demasiado, ambos estábamos agotados. Su último ataque me dejó casi sin vida, tendida en el piso viendo como se me acercaba para darme el golpe final, pero de repente, sentí como el amuleto que tenía en el cuello, ese amuleto que ahora tú tienes Hush, me devolvía toda la energía que había perdido. Dando un salto me puse en pié y le dirigí mi último ataque. Lo tomé desprevenido y segundos después estaba envuelto en llamas, muriendo poco a poco, pero con su último suspiro, antes de desaparecer emitió su última maldición. “Yo te maldigo Igradin, nunca más vas a utilizar la magia. El día que lances un solo conjuro, por más inofensivo que este sea, matarás a todos los que estén a tu alrededor, causarás tanto dolor como el que yo estoy causando ahora. No importa donde estés ni que tan lejos, un solo conjuro matará a todo tu pueblo y a todos tus descendientes. Igradín, ahora estás Maldita”. De repente el fuego que lo envolvía desapareció, al igual que el, pero una risa tenebrosa quedó flotando en el aire”.
Una lágrima rodó por la mejilla de mi madre al tiempo que los ancianos se alejaban de la casa y mi padre me llevaba nuevamente a la cama.
Ahora entendía...

[Asaldur]

Groxxxxxxxx

[tutucakiller]

UP Up Up !!!

Vamos que sale capítulo 7 !!!

[Angra]

En verdad me gusto.. mucho:thumbsup:
tu historia me transporto directo ala villa de los orcos, practicamente podia ver a Hush aprendiendo de su poder.Por favor quiero saver mas de su travesia atraves de la magia pliiiissss y conta de su madre tambien parece poderoza..
CAPITULO 4 !!! YA!!!!:1:

[sword]

Jajajaj Hush Escritora...no Conocia Ese Lado Tuyo....
Muyyy Wenaaaaaa La Hist Me Re Prendi =d
O Lo Patentas O Me Lo Robo Y Hago Un Libro Con Esto =p Jajaja
Bueno Che Me Voyy....nos Vemos Dentro De 1 Sem Mis Viejos Me Quitaron El Modem Y No Hay Un Ciber Q Tenga L2 =s
Ahora Sii Se Vemooo





Salu2

[tutucakiller]

Así que en penitencia y sin modem !!!!
Jajajajaaaaaa
Gracias por la crítica. nos vemos in game y estate atento que sale capitulo nuevo !!!!


Byesss.....

[Angra]

Vamos hush , capitulo 7 no nos dejes en suspenso

[tutucakiller]

Capítulo 7

Los niños corrían a esconderse tras las casas, los guerreros se apuraban para llegar al centro de la plaza, arrastrando sus pesadas espadas y sus afiladas garras, pero todo cuanto hacían era en vano. Veo las nubes de polvo levantándose bajo sus pies, sus armaduras repartiendo reflejos del sol a cuanto ojo las mirara, veo humo saliendo de las casas, veo gente tendida en el piso, muertos o casi muertos. Grandes guerreros y magos avanzando a una muerte aparentemente segura, con expresiones de pesar en sus miradas. El sufrimiento se palpa en el aire. Pero de repente aparece una figura en el horizonte que se dirige raudamente al centro de la plaza, esa figura no es otra que mi madre. Mientras corre veo como conjura para devolver un poco de vida a quienes están casi muertos, pero eso hace que descuide su defensa y reciba un ataque efectivo. Cae al suelo y se levanta de un salto, avanza hacia el lugar desde el que veo toda la acción, pero vuelve a caer. Pienso que con toda la intención se está volviendo el blanco ideal, para así ganar tiempo y esperar a que los pocos que quedan con vida puedan contraatacar, pero el poder de quien la ataca es tan fuerte que con cada caída suya otros guerreros mueren.
Trato de gritar, pero cuando abro la boca no son mis palabras las que aparecen, sino otras que dicen “Igradin, no tienes nada que hacer contra mí. Huye ahora y olvida el pueblo, tu gente y tus amigos. Huye Igradin, sálvate de mí”. Esas no eran mis palabras. Alcé mis brazos para correr hacia ella, pero en lugar de moverme lancé un conjuro en su contra y volvió a caer. No podía entender que era lo que pasaba, estaba matando a los míos, atacando a mi propia madre, destruyendo todo lo que quería. Mientras pensaba en todo ello, aparentemente distraje mi mente lo suficiente como para que en su último suspiro mi madre me atacase y me hiciese desaparecer. Mi cuerpo se hizo cenizas, y me elevé en el viento, flotando sobre toda la ciudad, viendo el daño que había causado. Casi nada quedaba en pié y casi nadie puede levantarse. Pero mientras desaparecía, perdiéndome en el cielo, lancé la última maldición a mi madre.

Me levanté de la cama de un salto, transpirada y aterrada, con el corazón latiendo descontrolado y a punto de salir por mi boca. Todo había sido una pesadilla, nada más que una pesadilla. La habitación estaba a oscuras y la claridad de la luna apenas se atrevía a entrar por las pesadas cortinas. La casa estaba en silencio, la ciudad estaba en silencio. Todos descansaban para repetir el ritual diario de salir en cada amanecer a entrenar y a cazar. Mientras recordaba lo que veía todas las mañanas traté de conciliar el sueño, cerré los ojos y me tendí en la cama, tratando de olvidar aquella pesadilla en la que causaba tanta muerte y dolor, en la que atacaba a mi propia madre. Poco a poco mi cuerpo comenzaba a relajarse y estaba a punto de rendirme al cansancio cuando sentí que desde algún rincón de mi cuarto alguien me observaba. Abrí los ojos tratando de ver en aquella inmensa oscuridad, pero la poca luz que se filtraba no era suficiente para permitírmelo. De repente, un fuerte viento sopló fuera de la casa y las pesadas cortinas se movieron, permitiéndome ver en el rincón más lejano una figura oscura, con una túnica raída y una capucha que le cubría completamente el rostro. Llevaba en sus manos un báculo, sobre el que estaba apoyado. El viento cesó y la habitación volvió a quedarse a oscuras. No sabía si gritar o salir corriendo de la habitación, el terror me había paralizado.
“Hush – dijo la voz – no trates de escapar. Soy lo suficientemente poderoso como para impedirlo, no lo dudes. Hoy, mientras dormías, sembré en tu mente mis recuerdos y viviste el día en que la historia comenzó. Sentiste el dolor de matar, pero también sentiste la grandeza de saberse poderoso, invencible. Hoy sentiste solo una parte de mi poder, así que imagina lo que es poseerlo todo, nunca tendrás rivales dignos, y dominar ciudades y reinos solo sería parte de la diversión, ya que nadie podría impedirlo. Vine a verte, ya que nadie en esta ciudad posee naturalmente la energía que tu posees, nadie puede en su primer día de entrenamiento conjurar ni dar muerte a un lobo salvaje como tu lo has hecho. Hush, vine a ofrecerme como tu maestro, como tu tutor. Vielle es muy poderoso, casi el más poderoso de la ciudad, pero aún tiene mucho que aprender, no podría enseñarte todo lo que yo ahora se. Solo una persona es casi tan poderosa como yo, pero su traición hacia mi nos volvió enemigos, cuando como aliados, como compañeros, podríamos haber dominado todos los reinos. Ay, Igradin, que tonta fuiste al rechazar aquella propuesta… Pero Hush, ya tendrás que decidir. El camino comenzará a desandarse muy pronto y deberás quedar en algún bando, no lo dudes“
Mientras escuchaba todo esto trataba de darme cuenta si nuevamente estaba soñando o realmente esto estaba sucediendo. ¿Era real aquella figura, aquel dialogo, aquella propuesta? Sentía algo que me presionaba el pecho, un calor, una energía que se desprendía de algún lado. Miré hacia el rincón donde esta misteriosa figura se encontraba y en medio de tanta oscuridad comencé a verlo nuevamente. Seguía allí parado, apoyado sobre el báculo, pero una piedra que estaba engarzada en la punta del arma comenzó a brillar, a tomar un tinte rojizo cada vez más fuerte. El colgante que me había obsequiado mi madre, el que contenía la energía de todas las generaciones de magos de mi linaje también comenzó a brillar y a inundar la habitación de un color azul profundo.
“Niña tonta, ¿tratas acaso de atacarme? ¿O solo deseas defenderte? – Su voz mostraba que estaba disfrutando aquel momento – Solo una palabra mía, un conjuro seria suficiente para acabar con tu vida ahora. No me desafíes Hush, no estoy seguro de querer hacerlo”
Tuve miedo, esa voz inundaba la habitación y rebotaba en todas las paredes, pero nadie parecía oírlas además de mí. Yo aún no había pensado en atacarlo ni en defenderme, no sabía por que aquel collar comenzaba a brillar cada vez con más fuerza, pero para mi sorpresa y la de quien me hablaba, cuando el medallón llegó a su máximo brillo un rayo salió de el y se dirigió al rincón opuesto a donde se encontraba aquel fantasma. El rayo, que había salido disparado se quedo fijo, flotando en el aire, en plena oscuridad. Yo no podía entender que estaba sucediendo, y creo que el portador de tan lúgubre vos tampoco acertaba a encontrar una explicación. La luz, luego de quedar flotando en el aire empezó a acercarse lentamente a mi cama, y mientras más lo hacía más brillaba. Hasta que en un punto la habitación se iluminó por completo, dejándome ver que la luz no estaba flotando, sino que se había concentrado en unas espadas, espadas que portaba mi madre mientras se acercaba a mí.
“Balanth, pensé que habías desaparecido, que habías muerto, pero veo que me equivoqué. Los acontecimientos de esta última tarde fueron muy extraños, tan extraños que mi corazón me dijo que debía cuidar a Hush esta noche, así que apenas se durmió decidí quedarme en un rincón y velar por ella” – Era mi madre quien le hablaba a aquella figura. Balanth, ¿era acaso el Balanth de la historia a la cual se refirieron los ancianos esta noche? Pero debería estar muerto, mi madre lo había matado aquella tarde hace ya mucho tiempo. Una carcajada se dejó escuchar interrumpiendo a mi madre.
“Amiga mía, hace ya mucho que no nos vemos. Mejor dicho, yo nunca abandoné la ciudad, siempre estuve flotando sobre ella, viendo que era de tu vida y de la de los demás. Aquel golpe que me diste fue lo suficientemente efectivo como para acabar con mi cuerpo, pero mientras ardía, mi Amo me salvó, transformándome en polvo para que mis cenizas volaran hasta algún lugar más seguro. Allí volvieron a juntarse para formar este cuerpo que ahora habito. Bueno, como notarás no es el mismo cuerpo que destruiste, es por eso que debo vivir en la oscuridad que me brinda esta túnica. Durante mucho tiempo he observado con placer, aunque a veces con un poco de pena, tu alejamiento de la magia. Aquella maldición parece haber funcionado, aunque todavía no la has desafiado, nunca más te he visto conjurar. Hoy casi lo haces, habría sido un buen momento, lástima que Vielle se interpuso en tan buena ocasión. Además, Ishanj terminó con la tarea que tu misma hija ya había comenzado al matar a ese lobo. Has elegido un buen hombre y un gran guerrero como esposo, es fuerte, tenaz e inteligente, además de un excelente padre. Te felicito”
“Nunca necesite de tu bendición Balanth, pero no me pongas nuevamente a prueba. Ya acabé contigo una vez, no te tengo miedo, sino lástima. Eras un excelente mago, el mejor de todos, pero dejaste que el poder te corrompa abandonándolo todo, inclusive a mi. Juntos podríamos haber ayudado mucho a nuestros hermanos, fue una verdadera lástima” – mi madre hablaba con decisión, pero se notaba en su voz un dejo de tristeza –
“Igradín, este no es momento de reproches. Ambos tuvimos que elegir, y desgraciadamente tenemos intereses distintos, por lo tanto ya no hay nada que hacer. Solo vine por tu hija, para ofrecerme como su maestro. Tu sabes bien que Vielle nunca podrá enseñarle lo que se… “
“Pero tu también sabes que no podrá enseñarle todo lo que yo se. Ambos fuimos los mejores, ambos somos los más poderosos. Hush nunca aprenderá de ti, ya que su corazón no alberga la codicia que tu tienes. Ella seguirá aprendiendo con Vielle, y si veo que te acercas a ella, no dudaré ni un instante en volver a atacarte. Si es necesario, te alejaré de mi hija y volveré a matarte, aunque eso le cueste la vida a todo el pueblo. Mi hija ante todo, ante todos”
“¿Estas dispuesta a matar a todos en el pueblo, inclusive a tu esposo para salvar a tu hija?” – Nuevamente la voz recorrió toda la habitación – “Matar a cientos para salvar solo a uno. Igradin, después de todo, nuestras elecciones no parecen ser tan distintas. Ya obtuve lo que vine a buscar, y realmente fue grato volver a verte, aunque deba matarte en un futuro tal vez no muy lejano. Hush, recuerda, cuando debas elegir que estoy dispuesto a enseñarte. Adiós”
La figura de aquel ser desapareció en el aire. La luz que salió de mi collar y se posó en las espadas de mi madre también comenzó a extinguirse, y con ella la figura de mi madre.
“Descansa Hush, mañana esto solo será un sueño”

[tutucakiller]

Un UP UP UP !!!!!

Byes...

[osmodiar]

Grande Hush, un lujo tenerte en la ally!!

Saludos
LoWang

[tutucakiller]

LoWang !!!!! Un lujo pertenecer a la Ally.

Byesss

[tutucakiller]

Un UP para el Rol !!!!!

[C0L0S0]

A la mierda, me leí todo. Atrapante e inmersiva historia. Hizo despertar mi WC interior, mi 1er PJ acá, C0L0S0... o sea cómo prestás atención a los detalles de las skills y buffs, llevadas a un dialecto literario, es lo mejor que leí a lo que a L2 concierne, más aún que las historias "oficiales".
La verdad te felicito y es una lástima que muy pocos anden por acá y se la pierdan como yo hasta ahora... Espero con ansias el 8vo capítulo!
Será tentada Hush por el lado oscura de la fuerza? Será la misteriosa aparición maligna que tuvo la madre antaño y que llevó a Balanth por el camino de los Sith en realidad el padre de Hush? (Hush... Yo soy tu Padre. -Nooo!!!). Se convertira Hush en un poderoso Jedi?? No se pierdan los próximos capítulos :D


Saludos y te dejo un /socialbow.

[sword]

Q GRANDE GASTONNN!!!! MUY WENOOOOOOOOOO EL 7º CAPP (NO SE DE DND SACARAS ESAS IDEAS PERO TE PASAS)
NO ME QUEDA OTRA Q FELICITARTE.....
SE VEMOOO IN GAME xD
ADIUUUUUUUUUUU

[tutucakiller]

Gracias Coloso !!!!!

Más de una vez he leido tus guias por ahí. Realmente sos un Groso.

Y bue, yo tengo que suplir mi manquedad in game con algo de Rol en el foro, que le voy a hacer !!!!!


Byes . . . . .

[sword]

JAJAJAJAJ SI ES VERDAD ES MUY MANKO EN EL JUEGO =======P
PERO PARA ESCRIBIR ES GM xD
ya te quedast re atras solo para vender tus -_- garras A...pero bue ya te voy a ayudar yo cuando te conectes ^^
ahora me voy a joder a alguien mas xD
chauzzzzzzzzzz

[tutucakiller]

Jajajajaja !!! Es cierto, soy manco, pero no lo oculto.
Las garras ya las vendí !!!! Ahora estoy tratando de vender las duales así compro las otras !!!!


Nos vemos In Game !!!

byesss...

[Eguevara]

Naa negro, te fuiste al carajo ... coincido con algunos, lejos la mejor historia de rol que leí, una atrás de otra, completamente atrapante, lográs que uno se imagine la situación y los personajes .. eso no es fácil, realmente escribís y relatás muy bien, acompañado de una gran imaginación.

un 10.

Veo que te venis tomando tu tiempo para escribirlas .. seguí haciendolo que acá tenes gente esperando con ganas de leer.

Saludos!

[tutucakiller]

Gracias Eguevara !!!!!

En breve sale nuevo capítulo.

Byessss......

[sword]

=P UPPPP POR HUSHHHH
QUEREMOS ELNUEVO CAPITULOOOOOOOO xD
jajaja bueno gastncto me re pasooo portate bienn....sueert
salu2 agus

[bardoblackarrow]

un Up por hush !! y un saludo a mi "alumno" de rol :D

[tutucakiller]

Un UP UP UP !!!!! Que se viene la Cap. 8


Byesss

[tutucakiller]

Otro UP UP UP Noestá de más !!!

[C0L0S0]

Dale papá subí el próximo que lo queremos leer en vez de tantos ups :p

[tutucakiller]

Capítulo 8

Al despertar a la mañana siguiente no sabía si lo vivido esa madrugada había sido un sueño o realmente había ocurrido, todo se había sucedido tan rápido, tan inesperadamente que mi cabeza infantil no podía aún diferenciar la realidad de la fantasía.
Al comenzar a vestirme rocé la herida que me causó el lobo ayer, y una puntada recorrió todo mi brazo. Parecía mentira que en tan poco tiempo, tantos acontecimientos se hayan sucedido a mi alrededor.
Una vez vestida corrí la cortina de la habitación y miré hacia fuera. Cerca de la entrada a la ciudad pude verlo a Vielle, hablando con mi padre. Ambos caminaban lentamente de un lado a otro. Cada tanto tenía la impresión de que el viento iba a traer sus palabras hasta aquí, pero eso no sucedió. Tuve que conformarme con observar que mi padre parecía estar encomendándole algo, algo importante.
Salí de la habitación, dirigiéndome a la mesa, en la cual, como todas las mañanas mi madre había dejado el desayuno servido. El pan y el té, aún humeantes, esperaban en el centro de la mesa. La casa se veía vacía y esta mañana particularmente se veía triste.
Me serví el té, corte con trozo de pan y empecé a desayunar. Fue en ese momento que mi madre entraba a la casa. Como todas las mañanas, me besó las mejillas, se sentó a mi lado y empezó a contarme que tan linda estaba la ciudad hoy.
“¿Qué sucedió anoche? ¿Realmente estuviste en mi habitación, junto a aquel espectro?” – con estas preguntas interrumpí su relato matinal.
“Si Hush, todo lo que recuerdas sucedió. Los acontecimientos del día anterior fueron muy extraños, y por eso decidí quedarme de pie en tu habitación. Balanth, o el espectro como tu lo llamas, estuvo ahí, ofreciéndose para ser tu tutor en el aprendizaje de la magia. Pero Hush, el esta lleno de codicia, de odio. Es muy poderoso, tal vez el más poderoso, pero está ciego por su ansia de poder. Nada bueno podrás aprender de el. Vielle es el más indicado para guiarte, aunque su poder nunca se podrá comparar al de Balanth.”
“Ni al tuyo” – le dije, recordando las palabras oídas la noche anterior.
“Es cierto, ni al mío, pero yo ya abandoné la magia. Hush, junto con tu padre eres el tesoro más preciado para mi, pero un solo conjuro por mi parte causaría mucho dolor a todo el pueblo. Debo vivir con esa maldición sobre mis espaldas. Bueno, termina el desayuno, Vielle te espera.”
Ya casi había terminado, así que apuré los últimos bocados y salí dirigiéndome hacia donde había visto a mi padre hablando con mi tutor. Mientras me dirigía hacia allí observé que dos de los ancianos hablaban bajo, casi en un susurro, pero sus expresiones denotaban mucha preocupación. Desacelerando el paso fui directo hacia ellos tratando de oír lo que pasaba, y a la vez pensando una excusa que poner en caso de que noten mi entrometimiento. La voz de uno de los ancianos llegó a mis oídos, pero era apenas perceptible.
“ …se están acercando. Nuestro explorador dice que seguramente llegaran esta noche, o a más tardar mañana por la mañana. Esta misma información también llegó por parte de nuestro espía, por lo que no hay dudas de que esto sea un error. Necesitamos urgentemente reunirnos con nuestros generales y comenzar a planear la defensa.”
“si, y debemos evacuar urgentemente a los niños y a todos aquellos que no puedan pelear. Debemos enviarlos a las cascadas, allí estarán a salvo hasta que la batalla acabe y podamos ir a buscarlos. Es hora de dar la alarma.”
Uno de ellos se dirigió rápidamente hacia la gran campana que estaba en medio de la ciudad y que hasta ahora yo nunca había oído. El otro, se dio vuelta y me vio. No había reproche en su mirada, no dijo una sola palabra. Su preocupación excedía por mucho el que una niña haya estado escuchando una charla de adultos.
La campana empezó a sonar y la gente a correr hacia el centro de la ciudad. Miré a lo lejos a mi padre, que corría también hacia ese lugar. Vielle en cambio caminaba lentamente hacia allí. Los repiques de la campana retumbaban en las montañas, en los árboles, en las paredes. Todo parecía amplificar aquel sonido. Muchos guerreros que estaban fuera de la ciudad, entrenando o cazando entraban a toda velocidad, como tratando de entender que era lo que sucedía, aunque todos lo sabían bien. Muchos años habían pasado desde la última vez que sonó esa campana, tantos años como la última vez que nos atacaron los humanos. Los humanos… ya habían sido derrotados más de una vez por nuestro ejército, pero así y todo insistían en atacarnos. ¿Por qué tanto odio?
Una mano me sujetó fuertemente del brazo y me arrastro al círculo que habían formado los ancianos. El mayor de ellos miró a todos los presentes y comenzó diciendo:
“Ojala esta campana enmudeciera para siempre, pero como tantas otras veces ha vuelto a sonar. Nuestros espías y exploradores nos dicen que el ejército humano se acerca a la ciudad. No pudieron decirnos quien los dirige, pero se rumorea que tiene muchas batallas ganadas y que lo acompaña un ejército mucho más numeroso que los anteriores. Hermanos, es tiempo de diagramar nuestra estrategia, pero mientras tanto, las mujeres, niños y ancianos que no batallen deben dirigirse a las cataratas heladas y esperar allí a tener novedades nuestras. Tomen solo lo necesario y salgan ahora. Llegarán horas antes de amanecer”
Miré quien me sujetaba el brazo y vi que era mi madre. Su mirada se perdía ahora entre todos los guerreros, hasta que encontró la mirada de mi padre, que también la buscaba. No hubo palabras, solo el asentimiento de él y unas pocas lágrimas que rodaron por la mejilla de mi madre.
“Vamos Hush, tomemos lo necesario y comencemos a caminar. Tu padre se quedará y velará por nosotros.”
Mientras tomábamos nuestras cosas miré por la ventana y vi como comenzaba el peregrinar de niños, mujeres y ancianos. Todos marchaban hacia las puertas, dándose vuelta a cada paso para mirar la ciudad a sus espaldas y a sus familiares guerreros. Estos estaban junto a la campana, junto a mi padre pensando cual era la mejor forma de defenderse esta vez. Las historias que tantas veces se contaron hablaban de batallas cuerpo a cuerpo, en la que los nobles guerreros orcos resistían todos los ataques para que, una vez el enemigo haya perdido sus fuerzas, ser curados por los magos y contraatacar con fuerzas renovadas.
Pero esta vez parecía ser todo distinto. Los informes hablaban de un ejército humano mucho mayor en número a los anteriormente vistos, y comandados por un guerrero que según los informes parece ser indestructible. Las caras en la ciudad habían cambiado, la preocupación era mucha. Nuestros guerreros estaban preparados para enfrentar al enemigo, pero muchos no estaban en la ciudad y eso nos hacía más vulnerables.
Me volví a mi madre y juntas salimos de la casa para unirnos a la muchedumbre que se alejaba. Como todos, me di vuelta y miré a mi padre, que desde lejos me hizo un gesto como diciéndome “no te preocupes, pronto estaremos juntos de nuevo”. Pero en ese momento un grito que provenía de una de las entradas a la ciudad se esparció por todos los caminos. Fue un grito de terror. Todos se alejaron de las puertas, los guerreros corrieron empuñando sus armas y claramente vieron lo que yo vi segundos después. Dos lobos entraban a la ciudad a toda prisa, con dos cabezas atadas a su lomo, generando terror en todos los que los veían. Uno de los ancianos dijo “son las cabezas de nuestro espía y nuestro explorador. Esto no es bueno, nuestros enemigos deben estar muy cerca ya, prepárense para …”
Una flecha atravesó la ciudad clavándose en medio del pecho del anciano, quien cayó muerto instantáneamente. El silencio se apoderó de todo por apenas un segundo, en el que las expresiones de melancolía pasaron a ser expresiones de terror. El silencio cambió por un leve zumbido y el cielo se oscureció. Parecía que los dioses estaban furiosos y dejaban caer encima nuestro toda su ira, pero no, lo que oscureció el cielo eran miles de flechas que buscaban nuestros cuerpos. Cuando las flechas dejaron de caer, muchos de mis amigos, mis hermanos yacían en el piso, algunos muertos y otros agonizantes. Los guerreros se dirigían a las puertas cuando cientos de bolas de fuego empezaron a caer también, diezmando más aún nuestro ejército.
Muertos, muertos por todos lados, sin distinción de edad ni de sexo. Todos estaban tendidos en el piso. Mi madre me abrazó y me envolvió en su cuerpo, protegiéndome de todos los ataques. Mientras mirábamos hacia la entrada vimos a algunos guerreros entrando heridos, mientras corrían tras ellos muchos enemigos, demasiados.
Entre todos ellos una figura resaltaba por su capa color rojo sangre y su espada brillosa. No hablaba, pero todos parecían obedecerle con solo una mirada. Mientras caminaba iba matando gente sin titubear, pero no miraba a los enemigos, los que no parecían ser problema para el. Su mirada buscaba algo, o alguien en la ciudad y de repente se clavó donde estábamos con mi madre. Una sonrisa se dibujó en su boca y sus ojos brillaron. Lentamente empezó a caminar hacia nosotras, lento pero con paso firme, y no había guerrero que pudiese detenerlo. Cuando solo nos separaban unos pocos pasos, una figura apareció entre nosotros llevando una gran espada. Estaba firme, como su fuese una pared imposible de atravesar.
“No eres un enemigo digno para mi, sal del medio y muere en manos de algunos de mis súbditos, no tengo tiempo que perder” – dijo la terrorífica figura.
Pero la figura estaba inmóvil. Solo un destello en esa gran espada rompió la monotonía de la imagen.
“No se adonde te diriges ni cual es tu misión, pero deberás pasar sobre mi para llegar hasta ellas.”
Quien habló ahora era mi padre, aquella figura que se interponía entre la vida y la muerte era mi padre. Miré a mi madre, y vi sus ojos llenos de impotencia. No había nada que ella pudiese hacer para ayudar, solo tener fe en su esposo, el compañero de toda la vida, quien más la había comprendido y ayudado.
Una figura se movió tras nosotros atacando a mi padre por la espalda. Era un daguero, que no sabía lo que hacía y que seguramente trataba de impresionar a su general, pero un solo golpe de la espada de mi padre alcanzó para quitarle la vida.
Tras la caída del asesino aparecieron otros, demasiados, pero mi padre pudo con todos.
Mi padre rechazó todos los ataques valientemente. Quienes arremetían contra el no estaban lo suficientemente preparados para enfrentarse a un general Orco, que basaba su vida en el entrenamiento riguroso, que día a día lo volvía más fuerte e inteligente.
“Basta” –se escucho la voz del general enemigo – “¿no pueden ustedes, excediendo por mucho en número vencer a un simple orco? No es de extrañarse que hasta ahora todas las batallas hayan terminado de igual manera, con la victoria de ellos.”
“¿Acaso el general tiene miedo de enfrentarme en duelo y sucumbir bajo el filo de mi espada?” – mi padre, con estas palabras desafiaba al enemigo -
“Orco irrespetuoso. Debería dejar que mis hombres sigan atacándote hasta darte muerte, pero es mi deber aceptar tu desafía. Prepárate a morir.”
Ambos se miraron fijo a los ojos, tratando de anticipar todo ataque, estudiándose. Fue mi padre quien dio el primer paso, y comenzó a golpear fuertemente el escudo del enemigo. La batalla había comenzado. Los dos generales golpeaban sus espadas en el aire, generando sonidos y chispas que se oían y veían desde lejos. En un instante en que se separaron, el general humano invocó una pantera, que junto con el comenzó a atacar a mi padre. Pero de un momento a otro, la pantera giró sobre si mismo y se enfrentó a nosotras, preparándose para dar un salto y caer sobre nuestros cuerpos. Mi padre, notando esto saltó sobre ella y con un solo golpe la cortó al medio, pero ese segundo fue suficiente para que el general, con una sonrisa en su boca, diese un golpe certero que dejó a mi padre tendido en el suelo, medio muerto, arrastrándose hasta nosotras. Al llegar arrastrándose a nuestro lado, lloró y nos pidió perdón.
Mi madre me abrazó fuertemente, pero eso no evitó que el golpe que el general le dio en la cara nos separase, dejándonos a algunos metros.
“Eres idéntica a la niña que me describieron. Entiendo que eres Hush” – dijo esto mientras me apretaba el cuello y me levantaba en el aire – “Niña, este es un excelente momento para morir. Mírame a los ojos y pídeme piedad, talvez vivas unos minutos más.”
“Por tu bien, suelta a mi hija ahora y vuelve sobre tus pasos. No me obligues a acabar con todo tu ejército dejándote vivo para que vuelvas con tu dueño humillado. Suéltala ya.”
La voz de mi madre resonó en toda la ciudad y todos los que se encontraban batallando dejaron de hacerlo. Los enemigos desfrutando el momento en que su general matase a esa mujer, y los aliados temiendo por la vida de toda la ciudad.
“¿Y como piensas detenerme estúpida mujer? Eres una contra todo un ejército. ¿Podrías acaso vencer a todos mis hombres?”
Mi madre tomo sus duales y empezó a atacar a todo el que se le acercara. Nunca había visto a nadie tan diestro con esas armas. No importaba cuantos vinieran ni que fuesen, todos sucumbían ante el filo de sus espada. Uno a uno fueron cayendo a su alrededor, formando montañas de muerte. El general seguía teniéndome del cuello, pero en un momento comenzó a apretar su puño. Lancé un grito ahogado y mi madre lo sintió en el momento, abalanzándose sobre el.
“No te acerques más, u oirás el ruido de los huesos del cuello de tu hija al quebrarse. Suelta tus espadas y dejaré a la niña.”
Dejó caer las duales al tiempo que el me arrojaba con toda su fuerza contra una pared cercana. No podía moverme del dolor que me causó aquel golpe, pero pude ver a mi madre, con los ojos inyectados en sangre y las lágrimas corriendo por sus mejillas. Me miró y me creyó agonizante, o muerta. El golpe me había quitado el aire, por lo que nada de lo que quería decirle salió de mi boca. Lo último que vi fue como mi madre empezó a brillar cada vez más, hasta que una explosión se desprendió de su cuerpo, haciendo que todos los que se encontraban a su alrededor fueran cayendo unos tras otros, muertos. El general se desplomó delante de ella sin siquiera haber tratado de matarla, la muerte lo llegó tan rápido que no pudo defenderse. Todo su ejercito corrió la misma suerte, pero también nuestros amigos, nuestros guerreros, ancianos, toda la ciudad cayó a sus pies. Ya no había gritos, ni llantos. El silencio se apoderó de todo. Solo mi madre quedaba de pié, mirando toda la muerte que había causado. Cayó de rodillas casi muerta, y en ese momento giró su cabeza y me vio, con los ojos abiertos, tratando de llamarla.
Me regaló una sonrisa desde la distancia y agachando la cabeza, mirando el piso solo dijo:
“Perdónenme… la creí muerta. Me he transformado en un monstruo, un monstruo como los tantos que había enfrentado en mi vida.”
Mientras susurraba esas palabras vi como la vida de mi madre se extinguía y su alma se alejaba de ella, dejándola tendida en el suelo. Su sangre, transformada en vapor se alejaba hacia la puerta de la ciudad, donde hoy había visto a mi padre, y a Vielle. Vielle… ¿Dónde yacía su cuerpo después de la batalla?
En medio del silencio sepulcral una voz se dejó escuchar
“Estúpidos humanos, todo salio como se había planeado. Por más numeroso que sea su ejército y por más fuerte que haya sido su líder, nuestros hombres podrían haberlos vencido, fue por eso que tentamos al general para que mate a Hush. Estábamos seguros que la ira de su madre no tardaría en aflorar, y solo ella era capaz por la maldición que cargaba sobre sus hombros de matar de una sola vez a los nuestros y a los enemigos. Todo ha salido como lo hemos planeado. Espero ahora que me elija para dirigir a sus ejércitos” – Vielle se dirigía a alguien más, a alguien a quien yo no llegaba a ver -
Ahora comenzaba a entender. Vielle, mi tutor había traicionado a la ciudad, a su gente, a mi madre y a mi padre. Había planeado todo esto solo para ser el más poderoso entre los orcos, pero estaba mi madre, y eso le creaba un problema. Fue por eso que valiéndose de toda clase de mentiras y engaños había cumplido con su objetivo y había terminado asesinando a mi madre.
“Maldito seas Vielle.”
Mi voz se dejo oír después de muchos minutos de silencio. Sacando fuerzas del odio que me inundaba me puse de pie, tomé las espadas de mi madre, que muerta y con los ojos abiertos yacía mirándome y me dirigí a mi tutor. Mientras me iba acercando sentía como el poder que había empezado a usar apenas un día antes comenzaba a protegerme, a hacerme más fuerte. Mi objetivo estaba a solo algunos pasos y su mirada no solo demostraba sorpresa por verme viva, sino también cierta ironía. No podía entender como alguien que apenas ayer había comenzado a entrenar iba a enfrentársele.
“Hush, deberías estar muerta como todos los demás, pero en todo caso, lo único que has logrado es demorar unos segundos ese destino. Muere ahora.”
Invocando la magia extrajo de mi cuerpo casi toda la vida, pero cada vez que lo hacía mi collar comenzaba a brillar y me la devolvía. Fui resistiendo todos sus ataques, y cuando ya estuvo al alcance de mis duales, descargue todo el veneno que me llenaba sobre el. Sin notarlo, sin siquiera sentirlo o planearlo primero lo envenené, luego incendié su cuerpo y por último, mientras ya me miraba con temor extraje toda su sangre de su cuerpo, haciendo que caiga al suelo hecho un manojo de piel y huesos.
Viendo tendido su cadáver, viendo los cuerpos de mi madre, mi padre y de todos quienes se encontraban en la ciudad en ese momento juré venganza contra quien había planeado todo este dolor. De ahora en más, todos los que oigan el nombre Hush nunca lo olvidarán.

[silhill]

La Verdad excelente este capitulo. Quede impactado. Te felicito.

Suerte

[tripagorda]

hush la verdad recien me me psue a leeer todos los capitulos estan muy buenos de verdad loco la sarpas muy buena la historia!!!!!
Tengo los ojos con lagrimas nose si es por el brillo del monitor y que estoy hace media hora leyendo o por la historia que escribiste.
Muy buena tu redaccion.
Te felicito lograste algo en mi que nadie logro es que lea porque jamas me gustan ningun libro pero esto me dio ganas de leerlo quiero mas capitulos!!!!!!!
Quiero que los que juegan ayuden a hush a lvl asi puede matar a todos!!!! :P

Te felicito de verdad muy buena

[tutucakiller]

silhill - tripagorda

Gracias Gente !!!! En breve sacaremos un nuevo capítulo de Hush. Veremos como se desarrolla la historia (o en otras palabras, veremos que se me ocurre en el momento).
Tripa, si sirvió por lo menos para que leas, en buena hora, seguiremos escribiendo.

Nos vemos In Game.

[C0L0S0]

A-la-mierda! Hush cada vez se inclina más al dark side parece...

Impresionante la verdad, te pasás... sólo te pido que no tardes tantos meses en postear el siguiente capítulo :p


Saludos y seguí asi, te felicito la verdad!

[Markofshadows]

Sin duda junto con las historias del elpy carlitos de racho lo mejor que lei. A la altura facilmente de la misma historia del lineage creada por ncsoft. Un 10 y un up

[iago64]

Dios que gran rolero. por favor flaco explicame de donde sacas tal calidad para escribir
yo estuve casi 1 dia para hacer media hoja de word sobre la historia de un silver ranger. o soy un fracaso para escribir o no si tengo el cerebro seco por tanto vicio.

por favor deja un par de consejos sobre como ahcer tan buen rol

[silhill]

Dios que gran rolero. por favor flaco explicame de donde sacas tal calidad para escribir
yo estuve casi 1 dia para hacer media hoja de word sobre la historia de un silver ranger. o soy un fracaso para escribir o no si tengo el cerebro seco por tanto vicio.

por favor deja un par de consejos sobre como ahcer tan buen rol

No es por nada locura, pero algunos nacen con el don de la creatividad, le salen ideas de la nada, a veces se traban y no tienen ideas pero la cretividad hace esa magia.

Suerte

[tutucakiller]

Creativos debemos ser todos, lo que pasa es que muchos le tenemos miedo a las críticas. Es un bajón escribir algo y que atrás venga otro y te castigue, te saca las ganas.
Pero bueno. Espero poder sacar un capítulo más esta semana !!!


Byes...

[tutucakiller]

Capítulo 9

La ciudad ya estaba a mis espaldas y no existía nada que me genere deseos de voltear a observarla. Ahora todo lo que me importaba era ver adonde me conducía el camino que se abría ante mi. Ni los lobos, ni los demás demonios me preocupaban, ya no había a que temer después de tanta muerte y tanto dolor. Lo único material que me había traído de la ciudad era el collar que me regalo mi madre, sus duales y un pañuelo que extraje de dentro de la armadura de mi padre. No había nada más que me interesase.
Delante de mí unos lobos esperaban agazapados en medio del camino, listos para atacarme. Sus ojos brillantes, su boca hambrienta, no había duda de que querían atacar. Pero cuando estuve a su alcance, sin temer, entregándome a ellos para que acaben con mi vida algo surgió de mi y poco a poco cayeron muertos envueltos en una nube de veneno. Yo no quería pelear, no quería defenderme, solo esperaba que el dolor que me inundaba el pecho se acabe.
Dejé los cadáveres de los lobos atrás y continué mi camino hacia donde el destino me guiaba. Debía existir algo, en algún lugar que pudiese explicarme ahora la diferencia entre el bien y el mal. Ese era mi camino y hasta tener la respuesta a esa pregunta me balancearía en el delgado hilo que delimita uno del otro, solo dejándome llevar por el instinto.
La expresión de mi madre aparecía a cada paso, tendida en el piso pidiendo perdón por el dolor ocasionado. Por defenderme había diezmado toda la ciudad, acabando con toda la vida alrededor, a excepción de la mía y la de Vielle. Algo nos había salvado a nosotros, solo a nosotros. Creo que el collar puede haber sido quien salvó la mía, o acaso habrá sido la imagen de Vielle matando a mi madre quien me permitió vivir, solo para vengarme.
Venganza, eso fue lo que sentí que debía hacer y fue lo que hice cuando el estuvo al alcance de mis espadas.
Pero, ¿Quién lo salvó a el? ¿Acaso ese maestro al que le hablaba y que muy cobardemente desapareció una vez que lo asesiné? Maldito, mi vida ahora persigue un solo propósito, encontrarte y darte muerte. Pero tengo mucho por aprender antes de hacerlo, ahora intuyo que no sería rival para el.
Recorrí el camino durante muchas horas, hasta que llegué a lo que supongo que los ancianos llamaban cataratas heladas. La zona estaba cubierta de arañas y osos y eso la transformaba en algo peligroso para alguien como yo. A lo lejos vi un lugar que me pareció lo suficientemente alto como para que estos animales no lleguen a alcanzarme, pero mientras trataba de trepar una araña me vio y avanzó rapidamente hacia mí. Salté desde la poca altura que había llegado a ganar y me enfrenté a ella desenfundando mis duales. Esta era la primera batalla que tendría contra algún animal que no fuese un lobo y no sabía como empezar el ataque. La bestia se movía velozmente de un lado otro sin dejar de apuntarme con sus púas. Sin previo aviso saltó en el aire directamente hacia mi, pero antes de llegar a asestar el golpe cayó muerta a mi lado. Algo brillaba sobre su cabeza. Me costó entender con la poca luz que daba la luna que eran una garra orca. Una figura salío de atrás de los árboles y camino hasta estar detrás de la araña. Estiró su brazo y recuperó su arma para limpiarla contra su armadura. Por primera vez pude ver si rostro. Era uno de los guerreros que había salido hace algunas semanas a cazar y aún no había vuelto.
“Hush, hija de Igradin e Ishanj. Hace unas horas llegué a la ciudad como uno de los únicos sobrevivientes que había logrado escapar al ataque de los humanos unas semanas atrás, pero al entrar vi que todos yacían en el piso, muertos. Solo se escuchaba el viento cortándose en las espadas y las garras que habían quedado tendidas en el piso. Busque sobrevivientes entre los guerreros, pero ninguno quedaba en pié. Al lado de uno de los muertos, encontré escrito con sangre, su propia sangre un mensaje que decía “Igradin no pudo dominar su odio e hizo que la maldición cayese sobre todos”. Tras leer esto me dirigí a mi casa, para encontrarme con la figura de mi esposa muerta abrazando a mi pequeño hijo, también muerto. Tu madre sabía lo que causaría un conjuro de su parte, pero así y todo lo lanzó. Mi pequeño hijo… aún puedo recordar su expresión el último día que lo vi. Yo me alejaba de la ciudad, como todas las mañanas mientras el jugaba con sus amigos. Hubiese sido un gran guerrero, pero tu madre le arrancó la vida”
Las lágrimas inundaban los ojos de aquel guerrero, creando un gran contraste entre su fortaleza y su sensibilidad. Me miraba fríamente, con desdén, con odio. Mi sangre había acabado con la suya.
“Mi madre fue traicionada por uno de los nuestros, por Vielle” – le dije tratando de explicar los sucesos de aquél día – “ella nos creía muertos a todos”.
“Mi hijo estaba abrazado a su madre, ni siquiera habían salido de casa” – la voz del guerrero fue ganando volumen – “y tu madre ciegamente los mató. Matarte no va a devolverle la vida a mi pequeño, pero va a aliviar mi corazón. Exijo tu vida a cambio de la de mi hijo. Te quité la araña de encima solo para que mueras bajo mis garras”
El desdichado padre me miraba desde las sombras, pero yo podía sentir su odio, su pena. En vano traté de explicarle nuevamente los sucesos de la tarde, ya que estaba cegado por el dolor y el odio.
“Toma tus duales y defiéndete, yo no soy como tu madre, no mato a traición”
Estas palabras acabaron por inclinar la balanza hacia un lado en este momento. La delgada línea entre el bien y el mal había desaparecido. Entendía el dolor del padre, pero nadie se refería en esos términos a mi madre.
“Guarda tus garras y retráctate. No existirá jamás quien hable así de mi madre y viva sin implorar perdón. Hazlo ahora y olvidemos este episodio. Después podrás volver a la ciudad y dar entierro a tu familia para que descanse”.
“Jamás te pediré perdón por ser la semilla de una asesina – dijo aquel ser – prepárate a morir”
No había terminado de decir eso cuando sus garras chocaron contra la montaña a mi espalda. Un movimiento repentino había logrado que mi cuerpo se desplace unos centímetros evitando una muerte segura. Las puntas de las duales rozaban el piso, dejando surcos a su paso. El guerrero retrocedió rapidamente y desde la distancia volvió al ataque. Esta vez las espadas detuvieron el primer golpe, y el segundo, y el siguiente. No sabía como había aprendido a usar aquellas espadas que apenas podía cargar, pero al momento de necesitarlas las mismas se volvían tan livianas como el aire y tan diestras como en las manos de un verdadero guerrero. La batalla era dura, aquel guerrero parecía tan fuerte como mi padre en sus últimos momentos de vida, cuando trataba de defendernos. ¿Era acaso la fuerza que tenían todos los padres que querían proteger o vengar a sus hijos? No lo sabía, lo que si sabía era que aquel irrespetuoso comentario contra mi madre iba a causar su muerte.
“Implora mi perdón, te lo ruego – le dije al guerrero – no quiero matarte”
“No puedes matarme niña tonta, eres solo una niña abandonada a la que ni siquiera su madre planeo dejar viva”
El odio de sus palabras inundó mi mente y llenó mis venas. Unos segundos después el guerrero estaba respirando con dificultad, envuelto en veneno y en llamas. Salté sobré el y cada una de las espadas se clavó a un lado de su cuello, dándole muerte casi instantáneamente. Extraje mis armas y me di vuelta, sabiendo que la poca vida que le quedaba no era suficiente para contraatacar.
“Qué los dioses se apiaden de tu alma Hush – me dijo – ahora podré descansar junto a mi esposa y mi hijo en paz, como lo hicimos hasta el día en que tu madre conjuró”
Esas palabras siguieron sonando en mis oidos, mientras separaba su cabeza de su cuerpo y lo arrojaba a los osos para que se alimenten.

[sword]

jajaja este tipo me mata por fin el capitulo 9 realmente t pasas gastoncito zarpado....menos mal q t conozco y se q no matas ni a una araña porksino cuandovoy en party con vos iria targeteandote :P
mejor no digo nada sobre tu mama no vaya aser q coma sopi xD
bueno feinn me voy llendo muy wenaaaaaa la histt
portate bienn
SALU2 AGUS

[silhill]

O.O, la verdad me volviste a dejar sin palabras, solo te digo que la verdad estoy impresionado, te vuelvo a felicitar y que sigas asi que la verdad es excelente tu trabajo.

Suerte

[Nocqponer]

Tutukakiller no hace faltan doble post .

[tutucakiller]

Tutukakiller no hace faltan doble post .

Perdón, debo estar medio cansado, pero no entendi. ¿Qué doble post?

[silhill]

Jajajaja, anda a saber que se fumo para decir que hiciste doble post.

Suerte

[C0L0S0]

Excelente. No dejás de sorprender... queremos másssss!!!


Saludos.

[sword]

UP para el Rol.....vamos feinnn queremos masss xD
un abrazo
SALU2 AGUS

[sword]

UP??? :P
saludos a todos los roleros del game
AGUS...

[sword]

BUE COMO YA ES COSTUMBRE SALE UPPPP :P
SALU2 agus

[joniptnipro]

ahahaahahahah

ke sebado este hdp de donde lo sakas forroo !!!

asjajja muy wenos los capitulos =)

suerte.

[marxiano]

jojo sarpada la historia quiero mas ta muy copada eso es rol 100% jejeje la evrdad negro cuando aces la pelicula jeje es sarpada la historia
felucidades y muchos up!!

[pablito1904]

Muy bueno, quiero mas

[sword]

daaa ya abndono la escritura est manko -.- ya lo voy a agarrar in game y lo voy a pkear :P
q desperdicio se kedo en la part mas emocionant de la historia...yo ya la habia impreso para q mi mami me la lea de cuentos de las buenas noches ='( (??)

[tutucakiller]

Jajajaaaa, la tenía medio abandonada a la Orquita, pero prometo esta semana o la siguiente meter otro capítulo !!!!!

Nos vemosssssssssssssssss

[silhill]

Menos mal, la verdad yo tambien despareci de estos lugares, pense que ya me habia perdido algunos capitulos pero veo que no fui el unico quedado, jejeje.
Bueno ya volvi y espero poder leer mas capitulos como los que lei antes.

Suerte

[marxiano]

vamos capo tenes un poder para entretener unico me colge leyendola como la del elpycarlitos y les digo la posta son las unicas historias en mi vida que las ley entreteniendome y difrutandola
elpycarlitos:nunca me rei tanto como cuan la ley
hush: estaba roleando 100% como cuando juego vampiro

[tutucakiller]

Capítulo 10

Desperté enceguecida por la luz del sol reflejada en el hielo que cubría cada rincón de este lugar. Las cataratas heladas eran efectivamente un lugar tenebroso para una niña como yo, abandonada a su suerte por la situación del día anterior. Casi habiéndolo olvidado bajé la mirada y vi lo poco que quedaba del cuerpo del guerrero que ayer había sucumbido a mis duales. Los osos, arañas y hombres lobo de las inmediaciones habían limpiado casi hasta el hueso la carne de aquel orco, dejando marcas de sangre en el hielo de las partes arrastradas. Rodeaban ese escenario uno que otro animal carroñero que se acercaban ahora en busca de lo poco que quedaba.
Ya no sentía odio hacia aquel con el que luchase a muerte anoche, pero tampoco me invadía la culpa por haberlo matado. Pensé en un momento en darle sepultura como todo guerrero merecía, pero segundos después abandoné esa idea. La muerte le había llegado al desafiarme e injuriar la memoria de mi madre, por lo que yo entendía que se merecía estar como estaba.
Junté de mi improvisado refugio las pocas cosas que me acompañaban y decidí bajar de allí atenta a los monstruos que merodeaban el lugar, aunque la mayoría de ellos se alejaban a medida que me acercaba. Aparentemente, su escaso poder de raciocinio alcanzaba para saber que no eran enemigos para mí, así que tomaban del cadáver el trozo más fácil de arrancar y huían a esconderse entre las sombras. Claro, nunca había sido para ellos tan sencillo conseguir una presa sin tener que pelear por ella.
Lentamente empecé a caminar alejándome del lugar, no sin antes volver a despedirme de aquel que fue el primer orco noble en caer bajo mis duales. Seguramente el destino me enfrentaría muchas veces más con los míos.
Sin saber a donde dirigirme en busca de respuestas comencé a internarme por los distintos senderos que se abrían ante mi. Por esos caminos fui atacada muchas veces por bestias salidas de las más horribles pesadillas, pero con todas ellas salí victoriosa, sintiéndome poco a poco más segura de mi misma y más poderosa.
Pasé muchos días en los bosques, viviendo de lo que cazaba y reflexionando sobre mi vida, sobre lo que había pasado. Es difícil explicar lo que una niña abandonada a la vera de los dioses puede sentir y puede aprender. Si bien la sed de venganza me ahogaba, cuando caían las noches no dejaba de ser una niña sola y asustada.
Durante esos días aprendí a escuchar los casi inaudible sonidos causados por los animales que se acercaban tratando de tenderme una trampa. Día a día iba aprendiendo más sobre mis poderes y sobre todo lo que me rodeaba.
Andando así, sin rumbo, me encontré nuevamente en la ciudad que me vio nacer, pero ya no era la misma. La luz ya no la iluminaba como antes volviendo la entrada a la misma muy sombría. Ya no se veía el fuego que nos guió durante tanto tiempo. Inclusive el paisaje de los alrededores había cambiado, dejando de ser un bosque frondoso para convertirse en una zona con neblinas eternas, pareciéndose más a un pantano que a una colina.
Rodeaban la ciudad infinidad de animales hambrientos, salvajes, fantasmas, matándose entre ellos y esperando una víctima. Cuando me dirigía a la entrada me atacaron muchas veces, pero no eran rivales para mis duales por lo que caían muertos a mi lado. ¿Cuanto había pasado desde aquella mañana? ¿Días? ¿Meses? ¿Acaso años? Era muy difícil contar los días cuando noche a noche tenía la misma pesadilla, aquella en la que veía a mi padre y a mi madre muertos y toda una ciudad devastada por el ansia de poder de unos pocos.
Llegando a la puerta me sorprendió ver tanda desolación. Era la primera vez en toda mi vida que veía la plaza central totalmente vacía. No se veían las improvisadas batallas de los niños, corriendo de un rincón a otro de la ciudad, corridas en las que tantas veces participé. No se veían guerreros preparándose para salir a cazar ni volviendo a sus casas para reunirse con sus familias después de una larga jornada. No había maestros enseñando a los futuros guerreros el arte de la batalla, ni forjando su temple. Mientras atravesaba la puerta vi en el extremo opuesto de la ciudad dos figuras que parecían estar hablando hasta que notaron mi presencia. Tras esto, una de ellas comenzó a caminar lentamente hacia mi. Aunque la distancia que nos separaba era mucha, pude ver que quien se me acercaba era un anciano, vestido con la ropa que típicamente lucían los grandes maestros, la misma ropa con la que Vielle acabó con mi madre y encontró la muerte.
Mientras el anciano se acercaba a mi fui tomando lentamente las duales y preparándome para defenderme, pero el, mirándome me dijo, con una voz llena de calma que llenó mi corazón de paz,
“No voy a atacarte Hush, puedes guardar tus duales. Caminemos un poco”
Llegó a mi lado y tomándome suavemente del hombro comenzó a caminar. Los primeros pasos los recorrimos en silencio, como esperando ver salir de atrás de alguna casa un niño correteando, para así borrar la desolación que nos rodeaba, pero solo escuchábamos el eco de nuestros pasos rebotando en todas las paredes.
“Hush, se lo que ha pasado, conozco toda la historia, los Dioses me informaron en mi viaje sobre lo sucedido. Tu no tienes la culpa de nada, y entiendo perfectamente la reacción de tu madre al ver morir a su esposo y al creerte muerta. Tu madre siempre fue muy poderosa, tanto como para acabar con Balanth y aunque no se creía que pudiese hacerlo logró vencerlo, pero quedó maldita. Ante tu muerte y la de Ishanj ya nada tenía sentido para ella, por eso conjuró. No soy yo el indicado para juzgarla al respecto, ya que son los dioses quienes deben hacer ese trabajo, pero no todos los orcos que están volviendo a la ciudad podrán entenderlo. Muchos perdieron todo lo que amaban, amigos, esposas, esposos, hijos, padres y el dolor que sienten es tan fuerte que no podrán entender que el llevar la sangre de tu madre no te hace culpable. Serás acechada como si fueses un animal salvaje, y aquellos a los que tanto admirabas los verás ahora como a tus verdugos. Hush, de ahora en más deberás defenderte de todo y de todos. Hay orcos diseminados por cada rincón de Aden esperando encontrarte para saciar su odio, su impotencia, por lo tanto ya no habrá ningún sitio seguro en el que puedas ocultarte. Ni siquiera yo, el más anciano entre los ancianos que quedamos podré defenderte. Espero que los dioses, cuando juzguen a tu madre nos informes su resolución y así, tal vez, acabar con tu persecución.”
El anciano hizo silencio, me miró y comenzó a desandar el camino. Yo, obediente lo seguí al centro de la ciudad, donde se encontraba la otra figura.
“Ella es la única persona en esta ciudad que puede enviarte a cualquier parte. No existen para ella distancias inalcanzables ni puertas infranqueables. Pequeña, de ahora en más estás por tu cuenta. Hay una leyenda que dice que hace mucho tiempo, muchísimo tiempo un orco maestro de maestros abandonó la ciudad cuando creyó que todos sus alumnos habían alcanzado el máximo poder y conocimiento de los orcos. Vielle fue uno de sus mejores alumnos, pero existen rumores que dicen que la verdadera causa de su retiro fue que una tarde pudo ver en sus ojos algo que lo defraudo. El maestro entonces se retiró y nunca volvió a ser visto por los orcos. Lo último que se supo es que desde aquí viajó a la tierra de los Elfos de la Luz, y que tras reunirse con su máximo líder se alejó y se perdió en medio de la noche. Ve a la ciudad de los elfos claros. Ellos son en su mayoría de gran corazón y grandes defensores de la justicia, tal vez encuentres allí refugio por un tiempo, pero no abuses de su hospitalidad, recuerda que muchos estarán buscándote, y si los elfos no te entregan podría despertar una nueva guerra. Es más, puede que en ese lugar consigas alguna pista para encontrarte con el viejo maestro, y si así fuese, tal vez el acepte tomarte como su alumna y pupila. Ahora si, es tiempo de que abandones la ciudad. La noticia de lo sucedido en la ciudad ya recorre todo el mapa y empezarán a llegar los primeros guerreros. Adiós Hush, que los Dioses te acompañen”
Sin una palabra que agregar ante la elocuencia de aquel maestro me dirigí hacia la mujer que debía enviarme a la ciudad de los Elfos. Sentía que esta fue la última charla amable que tendría con un Orco por mucho tiempo, quizás hasta que encuentre al viejo maestro.

[Juanma_RB]

WOOOWW


ME ENCANTO LA VERDAD MUY BUENA (y)

[tutucakiller]

Un UP para la orquita !!!

Byesss

[sword]

weeeeeeeeeeeeee porfinnnnn vovliooooooooooooo...porun segundo pense q la hist terminaba en el 9 al mejor estilosuspenso Oo (?)
bue feinn me re paso portat biennnnnn

[tutucakiller]

Que rápido se va la orquita para abajo !!!

Un UP UP UP

[tutucakiller]

Otro UP así seguimos ??

[C0L0S0]

Excelentísimo como siempre, cada tanto logueo para ver si encuentro alguna historia tuya y esta vez se me dio =)

Congratz.

[silhill]

A bue, la verdad se esperaba esto, otro capitulo mas, yo ya casi nunca entreo al foro, menos mal que lo hice.
Segui asi que la verdad lo haces de maravilla.

Suerte

[marxiano]

por dios cadaves esta mejor esto segui k-po esto e sdemaciado atrapante para cuando la peli???

[Nube]

uooouu!! k groso! en todo este tiempo frecuentando el foro no me habia tomado unos minutos en leer este post. Increible historia!! muy muy atrapante, da gusto leer algo tan bien escrito, tan rolero... me encanto!
kiero yaaaaaaaaaaaaaaaa otro capitulooo!!!!
muy copado enserio che! :1:

espero k siga la historia pronto =)

[tutucakiller]

Un UP para HusH, que se quedó muy atrás.

Sale nuevo capítulo en breve !!!!!

Saludos,

[tutucakiller]

Capítulo 11

“El camino que te ves obligada a seguir es duro, misterioso, pero en el mismo conocerás un sinnúmero de seres. Con algunos entablaras amistad, otros te serán indiferentes, pero ten cuidado, muchos no dudarían en matarte por venganza, para obtener tus cosas, o simplemente por el placer de hacerlo. Desgraciadamente el mundo está plagado de estos últimos.” – la mujer hablaba con calma. Conocía infinidad de seres aunque nunca había abandonado el lugar en el que estaba para recorrer los mapas. Ella había transportado a tanta gente hacia tantos lugares distantes que solo con las cosas que le habían contado parecía conocer cada rincón.
“Ya conoces a los humanos, los has visto atacar la ciudad, pero no te dejes influenciar por esas terribles imágenes, ya que no todos buscan la guerra. A medida que recorras el mundo te encontrarás con otros seres distintos a los orcos y los humanos. Elfos de la Luz, Elfos de la Oscuridad y Enanos están diseminados por todos lados. También entre ellos encontraras gente de buen corazón. Ahora pequeña, dime hacia donde quieres dirigirte y te concederé el viaje”
“Desconozco los nombres de los lugares a los que podrías llevarme, pero el maestro me indicó que me dirija a la ciudad de los Elfos de la Luz. Si, a ese lugar”.
La mujer me miró y hizo un gesto de aprobación. “Es el mejor lugar para que empieces con tu búsqueda. Los elfos de la Luz son en su mayoría seres hermosos y pacíficos. Estarás segura un tiempo en su ciudad, pero recuerda el consejo del anciano, no abuses de su hospitalidad”.
Cuando terminó de decir eso, pronunció unas palabras en un idioma para mi desconocido y sentí que mi cuerpo empezaba a volverse más liviano, una sensación tan placentera… Cerré los ojos y al volver a abrirlos estaba en una ciudad completamente diferente a aquella en la que había nacido. Acostumbrada a ver casas rústicas, templos construidos con burdos pero sólidos trozos de roca, murallas elevadas, antorchas en casi todos los edificios, fuego, mucho fuego, pero casi ni una sola gota de agua. En cambio, ahora veía, en esta ciudad una arquitectura exquisita. Paredes de blanco y brillante mármol decoradas con dibujos realizados por los mejores artistas. Los pisos de la ciudad estaban relucientes, como si la gente no caminase por ellos, sino más bien como si flotasen sobre ellos. Desde donde estaba veía que la ciudad parecía flotar en el aire apenas tocando el suelo con sus salidas, unos hermosos puentes custodiados por guardias con armaduras relucientes. Más allá de la ciudad se veían campos y campos llenos de verde, un verde tan profundo, tan distinto al de mi ciudad. Los árboles dibujaban con sus sombras obras maestras en las extensas praderas, realmente apreciar ese paisaje llenaba mi corazón de una inmensa paz.
Volviendo nuevamente la mirada a la ciudad vi en medio de ella un inmenso árbol que daba la sensación de custodiar todo desde su imponente altura. Rodeándolo había una gran fuente, como un lago interno sobre el que jugaban unas hermosas criaturas. No se veía en sus rostros ni en sus juegos nada relacionado con la guerra. Eso llamó mucho mi atención, niños que no jueguen a ser guerreros nunca llegaran a serlo pensaba. Es curioso que ninguna otra raza haya dominado aún a los Elfos.
Sin saber a donde dirigirme vi un hermoso edificio, que parecía ser el más importante de la ciudad. Se accedía a el a través de unas escaleras que tenía a sus lados, exquisitamente decoradas, y hacia allí me dirigí. Cuando estaba llegando tuve la sensación de que alguien me observaba, rápidamente y sin dudar tomé mis espadas y me di vuelta lista para defenderme. Grande fue mi sorpresa al ver a una Elfa, con una armadura que parecía no pesar nada, un escudo y una brillante espada, pero sin aparentar querer atacarme. Me miró y comenzó a cantar suavemente. Su voz era tan dulce, tan clara, que lo primero en lo que pensé fue en aquellas noches en que mi madre, cuando yo no podía conciliar el sueño, se sentaba a mi lado y cantaba.
“Perdona si te asusté, no fue mi intención hacerlo. Puedes guardar tus espadas, nadie en esta ciudad te atacará”. Su voz era tan bella como su canto. Sin saber bien por que me convencí con tanta facilidad, guardé mis duales. Ella se dirigió hacia mi y extendiendo su mano se presentó: “Mi nombre es Emma y te doy la bienvenida a nuestra ciudad. Espero que tu viaje haya sido placentero. Ven, caminemos un poco”. Tras decir esto se dio media vuelta y comenzó a caminar hacia el otro extremo de la ciudad.
“Aguarda” le dije, “debo ver al gran maestro de tu ciudad, tengo muchas cosas que preguntarle y espero que pueda darme algunas respuestas sobre un anciano orco que llegó aquí hace ya muchos años”.
Ella sonrió, me miró y dijo “¿si el anciano llegó hace muchos años, por que no puedes esperar tu algunos minutos más? El gran maestro te dará todas las respuestas que tenga a tus preguntas, y te aseguro que no tiene planes de abandonar la ciudad en las próximas horas. Así que caminemos, ven, no seas tímida.” Se acercó a mí, y tomándome de la mano me indicó uno de los puentes que salían de la ciudad. Caminamos unos minutos por ese puente, hasta que pisamos el camino fuera de la villa. Caminábamos en silencio una junto a la otra y nos adentrábamos poco a poco en los bosques. Veía cada vez más lejos la ciudad y cada vez más cerca unas ruinas. En ellas se veían algunos monstruos que parecían prepararse para atacarnos. Lentamente acerqué mis manos las duales, preparándome para defenderme. Eran 5 o 6 monstruos los que querían atacarnos. No parecían ser muy fuertes, pero nos superaban en número. Seguramente saldremos victoriosas de esta batalla.
Repentinamente, Emma tomo mis manos y las alejó de mis espadas. “Debes estar muy cansada por el viaje. No conoces a estos enemigos, no sabes como reaccionan. Déjame enfrentarme a ellos, los conozco, y no es la primera vez que lo haría”.
“No dudo de tu fuerza Emma, pero creo que si tu sola te enfrentas a esa cantidad de monstruos podrías sucumbir ante sus mazos” le dije.
Emma esbozó una sonrisa tímida, pero en sus ojos se veía un brillo especial. Algo de esta situación la divertía.
“No temas Amiga, si necesito tu ayuda no dudaré en pedirla, lo prometo".
No dudaba de su valentía, estaba decidida a enfrentarse a aquellos seres, pero no creía que fuese lo suficientemente fuerte como para enfrentarlos. Su cuerpo era delgado, no se veían músculos, no tenía la fortaleza de un orco. Pero realmente la transportación me resultó agotadora. Decidí dejarla luchar, pero estar preparada para el momento en que lo necesitara, que supuse sería pronto. La miré y asentí con la cabeza. Ella sonrió y se dirigió directamente hacia ellos caminando lentamente, cantando. Había algo raro ahora en su canto, algo que no podía entender.
Cuando por fin dejó de cantar aquellos monstruos la habían rodeado y estaban listos para atacarla, con su boca abierta, sus mazos, sus hachas, con la mirada llena de odio. No solo la superaban en número, sino que su físico era mucho más grande que el de Emma. Iba a tener que sumarme a esta batalla, no importaba cuan débil me sentía. Cuando quise ponerme en pié para pelear ella me miró fijamente y me dijo “Ten fe amiga, no dudes de mi”. Al terminar de decir eso, sacó su espada y corrió hacia delante a una velocidad increíble, golpeando con su escudo al primero de los monstruos y dejándolo duro, paralizado. Luego saltó hacia atrás, al tiempo que clavaba su espada en el pecho de otro. La sangre tiñó el aire de rojo, pero antes de llegar al pasto la espada había cortado la cabeza del tercero. Habían pasado apenas unos segundos desde que comenzó la lucha y la mitad de sus enemigos ya estaban fuera de combate. Emma no parecía luchar contra ellos sino más bien parecía bailar entre ellos. Su agilidad era increíble, sus movimientos armónicos y certeros, todo lo que veía, su forma de pelear era tan distinta a la que había visto en mi ciudad natal un tiempo atrás, cuando todo comenzó. Los orcos éramos duros y fuertes. Nos parábamos frente a nuestros enemigos y no nos movíamos hasta que uno de ellos cayera. No había nada de arte en nuestra lucha. Solo vencía el más fuerte, el más preparado. En cambio verla a ella era algo totalmente nuevo para mi. No era fuerte, pero no lo necesitaba. Era rápida como nunca había visto. Evadía los golpes de los enemigos con tanta naturalidad, como si supiese todo lo que iba a pasar.
Ya habían caído 3 de aquellas horribles criaturas y Emma estaba intacta, no había recibido un solo golpe, un solo raspón. Seguía moviéndose entre ellos, asestando golpe tras golpe, liquidando monstruo tras monstruo. Ahora solo quedaban 2 de ellos, y Emma se dio vuelta y empezó a caminar hacia mi, dándoles la espalda, cometiendo un error gravísimo, casi infantil. Las fieras comenzaron a correr hacia ella para darle el golpe final, la boca abierta llena de rabia, las garras afiladas y sus armas sin una sola gota de sangre. Salté desde mi lugar y tomando mis espadas comencé a correr hacia ella tratando de llegar antes que los monstruos, pero la distancia que me separaba era mucho mayor de la que los separaba a ellos. Miré con terror a mi nueva amiga al tiempo que gritaba que gire para volver a enfrentarlos, pero ya era demasiado tarde, entre la muerte de Emma y aquellas bestias solo había un paso de distancia.
El tiempo se paralizó. Vi la cara de ella reluciente, la mirada con una chispa juguetona, una sonrisa amplia, sus rubios cabellos flotando en el aire elevados por el viento, su blanco cuerpo contrastando con el color de aquel bosque, sus brazos colgando a los lados, su escudo y su espada brillando con los rayos del sol, y tras ella, a solo un paso, la muerte que se acercaba. Seres opacos, armas rústicas construidas con madera y roca, miradas desencajadas, bocas hediondas con dientes afilados, cuerpos verdes, putrefactos, odio inundando cada gesto y llenando cada rincón de aquellas almas perdidas.
Que forma tan tonta de perder la vida, nunca había que bajar la guardia hasta estar plenamente seguro de que los enemigos habían muerto o huido.
El tiempo se puso nuevamente en marcha y esas imágenes que habían quedado en mi retina nuevamente adquirían velocidad.
Emma me guiño un ojo y tras dar un salto giró en el aire y cortó al medio a aquellos 2 infelices que la perseguían. Sus cuerpos cayeron pesadamente al piso y sus ojos, abiertos aún reflejaban todavía la sorpresa de aquel ataque. No hubo nada realmente que pudiesen hacer para resistirse.
Mi amiga cortó el aire varias veces con su espada quitando así la sangre que tenía y volvió a enfundarla ya limpia. Acomodó un poco su armadura, más por un tema de elegancia que por la batalla en sí y me dijo “Nunca aprenderán. Aún no me has dicho tu nombre”.
Todavía asombrada por la batalla que acababa de ver, por la agilidad de aquella guerrera me di cuenta que tenía razón. Ella se había presentado pero yo no.
“Te pido disculpas, fue muy descuidado de mi parte no presentarme. Mi nombre es Hush, hija de Igradin e Ishanj, descendiente de los dioses fuego, soy Warcryer”.
Emma echó a reír desmesuradamente, como si todo lo que había dicho hubiese sido broma.
“Es un gusto conocerte Hush. Te pido disculpas por mi risa, pero es que por aquí no estamos tan acostumbrados a presentaciones tan detalladas. Quizás deba decirte entonces que yo soy Emma, como ya te había dicho, Swordsinger, descendiente de los dioses del agua y… bueno, con que me digas Emma creo que es suficiente. Ahora si, ven que te acompañaré a ver al Gran Maestro”
Y tras decir esto comenzamos a caminar nuevamente hacia la ciudad, albergando la esperanza de que el gran maestro pueda darme algunas respuestas.

[marxiano]

jeje feo como te lo dije en el foro del clan zarpada historia jeje repito pa cuando la peli jaja

[joaco36]

me das miedo ¨¨¨::Scary::

[silhill]

Bueno, vuelvo despues de un gran tiempo de pisar el foro por asi decirlo y esta vez al contrario que la anteriro encontre un nuevo capitulo, la verdada espero que sigas asi como siempre, me encanta lo que haces, espero que sigas asi poniendo nuevos capitulos.

Suerte

[tutucakiller]

Se viene capítulo nuevo en breve!!!!

[marxiano]

Se viene capítulo nuevo en breve!!!!

eaea feo para cuando dale quiero saber mas dale feo :2guns:

[tutucakiller]

eaea feo para cuando dale quiero saber mas dale feo :2guns:

Gracias Pablo!!!!
Ahora estoy con unos quilombos personales importantes, por eso estoy medio desconectado del mundo. Apenas se me acomoden las cosas vuelvo!!!

Byessss

[tutucakiller]

UUUU... cuantos recuerdos!!! bueno, aunque no se si volvere al L2 quizas pueda retomar la historia. Nos vemos!!!

[AngrodTinuviel]

Retomala ^^
Esta muy buena jejeje (Y)

[ClariceStarling]

+10 limones man esta muy buena la historia como dicen retomala no los dejes con la intriga

[Nighthawk]

jajjaj... ya me veo una historia estilo Xena, pero Orca XD

[marxiano]

UUUU... cuantos recuerdos!!! bueno, aunque no se si volvere al L2 quizas pueda retomar la historia. Nos vemos!!!

noooo volviste por estos pagos un groso con todas las letras se te extraña un montón feo haber cuando volves.
y dale unos capítulos mas a la orca que se lo merece

[yayacule]

Me gustaria ver que pueden llegar a armar el que hace las animaciones ( wansoft creo que era...o el duenio de malenaluna para ser mas claro) y tutukakiller teniendo en cuenta los capitulos de hush.



Mepa q la re flashie xd

[marxiano]

Me gustaria ver que pueden llegar a armar el que hace las animaciones ( wansoft creo que era...o el duenio de malenaluna para ser mas claro) y tutukakiller teniendo en cuenta los capitulos de hush.



Mepa q la re flashie xd

jaja creo que puede quedar algo bueno, pero llevaria su buen tiempo ya que la animacion lleva mucho tiempo dejarla buena, pero cris tiene buen ojo

[KimeraMC]

Esta muy buena la historia, y comos los otros quiero mas!! ^^ Saludos, no dejes a tus fans con la intriga xD